El mercado de divisas: ¿Qué productos se pueden contratar?
Como hemos podido conocer, el mercado de divisas o mercado de tipos de cambio es un mercado global y descentralizado en el que se negocian divisas y que nació con el objetivo de facilitar cobertura al flujo monetario que se deriva del comercio internacional.
Dentro del mercado de divisas podemos contratar diferentes tipos de producto en función de las necesidades que queramos cubrir. A continuación detallamos los productos más representativos de dicho mercado:
- Contado o spot; contrato por medio del cual dos partes acuerdan intercambiar un importe de una moneda por otro, en otra moneda distinta, en función del precio de mercado de ese par de divisas. Generalmente ese intercambio de importes se producirá 2 días hábiles (D+2) después de acordarse la operación (aunque algunos pares tienen fecha valor D+1 como es el caso del dólar y la lira turca USDTRY).
- Seguro de cambio o forward; acuerdos entre dos partes para intercambiar un importe de una moneda por otro, en otra moneda distinta, que tendrá lugar en una fecha futura superior a dos días hábiles. Hoy se acuerdan los términos de la operación (par de divisas, plazo, importe, tipo de cambio) que tendrá lugar en el futuro y hasta entonces no hay movimiento de fondos. Normalmente distinguimos entre seguros de cambio a la exportación (venta de moneda extranjera para convertirla a la moneda doméstica) y seguros de cambio a la importación (compra de moneda extranjera por nuestra moneda doméstica).
- Seguro de cambio no entregable; en determinados países, como Brasil, Colombia o Chile, existen controles o restricciones a los movimientos de capital. Por ello se emplean los seguros de cambio no entregables (o NDF- Non Delivery Forward) como instrumentos de cobertura o especulación sobre el tipo de cambio. Son acuerdos similares a los seguros de cambio pero en lugar de producirse una liquidación con movimiento físico de capitales o principales, se produce una liquidación por diferencias, comparando el tipo de cambio acordado inicialmente con el tipo de cambio de mercado del día del vencimiento (fixing o benchmark de referencia de mercado) y se calcula el importe a pagar o recibir sobre el “nocional” (importe de referencia que no se intercambia) empleado.
- Swap de divisas; son el instrumento con mayor cuota de volumen del mercado (47% aproximadamente). Son contratos bilaterales, por medio de los cuales las partes acuerdan intercambiar temporalmente (p.e. durante 6 meses) dos importes en monedas distintas. En realidad, estos instrumentos son la suma de un contado y un seguro de cambio; hay un intercambio inicial en fecha spot (D+2) y un intercambio final en la fecha de vencimiento. La diferencia entre el tipo de cambio spot y el tipo de cambio a plazo o forward es lo que se denomina como puntos swap y que básicamente refleja el diferencial de tipos de interés entre las dos monedas consideradas.
- Opciones de tipo de cambio; son acuerdos entre dos partes por medio del cual una de ellas adquiere, a cambio del pago de una prima, el derecho para compra (call) o vender (put) una moneda por otra, mientras que la otra parte adquiere una obligación de venta o de compra a cambio de dicha prima. Son, junto con los futuros sobre tipo de cambio, los únicos productos del mercado que se cotizan en mercados organizados.
- Futuros sobre tipos de cambio; son seguros de cambio cotizados en mercados organizados por lo que sus características, a diferencia de los primeros, son estándares; importe de los contratos, vencimientos, etc. Podemos negociarlos en el CME (Chicago Mercantile Exchange), que es el mercado organizado más líquido, y en otros mercados como Euronext o el Tokyo Financial Exchange.
Canales de distribución del producto de FX
Generalmente identificamos el contado como producto de flujo mientras que el resto de productos son considerados como derivados de tipos de cambio.
Ahora bien, ¿cómo se distribuyen estos productos a los clientes? ¿qué canales se emplean para ello? Básicamente podemos distinguir entre los canales tradicionales (teléfono, dealing, email) y los canales electrónicos. Son estos últimos los que mayor relevancia han adquirido durante los últimos años de manera que más del 60% del volumen total negociado tiene lugar a través de plataformas electrónicas.
Dentro de las plataformas podemos diferenciar entre las bilaterales o propietarias (relación bilateral entre la entidad financiera y el cliente) que pueden estar enfocadas a pagos internacionales (transaccionalidad) o al mercado de divisas propiamente dicho; y las plataformas multibanca, donde un conjunto de entidades financieras cotizan precios simultáneamente a los clientes. Un buen ejemplo serían las plataformas 360T o FXall.