Los autónomos ya pueden firmar sus contratos a distancia
A día de hoy, la mitad de los contratos que firman los particulares en BBVA ya se hacen a distancia, bien a través de la app de la entidad financiera o en el área personal de la web. Es un servicio que se lanzó en 2014, pero cuyo uso despegó hace ahora un año, cuando se puso en marcha la opción de hacerlo a través del smartphone. Ahora, los autónomos también pueden disfrutar de esta herramienta, que les facilitará el poder firmar sus documentos en cualquier lugar y desde un dispositivo móvil.
Las nuevas tecnologías han hecho que los clientes demanden nuevos servicios a través de su móvil, que les faciliten la vida y que hagan más eficiente su tiempo. Y la sencillez es una de las características de la firma a distancia, ya que tanto particulares como autónomos, pueden utilizar un servicio que tiene plena garantía jurídica y legal. Los autónomos, que en muchos casos regentan negocios con horarios amplios, ya no tendrán que desplazarse a la oficina para firmar los productos que deseen contratar.
La sencillez de firmar en cualquier lugar
La firma a distancia es una opción para que aquellos clientes particulares que quieran contratar un producto, como es el caso de un seguro, un depósito o un préstamo, tengan la opción de firmarlo sin ir a la oficina. Pero desde el mes pasado, los autónomos pueden firmar a distancia el alta de un comercio con o sin TPV o las tarjetas de negocio. El proceso es muy simple. El cliente se informa del producto que le interesa y, en el caso de que quiera contratarlo, el gestor le envía el contrato a su buzón con todos los detalles: intervinientes, condiciones del mismo y la información legal. Para poder acceder a la documentación, el cliente debe introducir su clave de usuario y, una vez que se ha tomado el tiempo necesario para tomar la decisión, solo quedaría firmarlo a través de una clave.
La libertad de elegir cómo firmar
¿Qué ocurre si hay un producto con dos o más titulares? En ese caso, cada uno de ellos elige su fórmula para firmar que más le convenga. Es habitual, de hecho, que el proceso comience en la oficina y los interesados, tras revisar la documentación, acaben firmando fuera de ella.
El perfil de los usuarios es muy diverso
Clientes de todas las edades lo utilizan, porque ven que es un servicio cómodo y sencillo, ya que toda la documentación acerca de los productos puede tenerse en la web y disponible en cualquier momento.
La firma manuscrita disminuye su uso
Si en diciembre de 2015 un 32% de las firmas eran manuscritas, nueve meses después esta cifra desciende al 13%. El auge del uso de la tablet en las oficinas y, sobre todo de la firma a distancia, que ha crecido más de un 15% en los nueve primeros meses de este año y representan ya la mitad de las contrataciones, son las razones. Números que se verán incrementados después de que en noviembre se haya abierto este servicio para los autónomos.