Los Andes centrales de Perú, un lugar perfecto para aclimatar
El Nevado Urus, que en quechua significa 'cerebro o médula' es una de las montañas más visitadas de de la Cordillera Blanca de Perú. Situado en la Quebrada Ishinca es un lugar perfecto para el entrenamiento y la aclimatación antes de acometer la ascensión de cumbres más altas. De ahí que en 2012 Carlos Soria, aprovechando un viaje al país andino, escalara esta cima, junto a la del Nevado Ishinca, en la previa de su Expedición BBVA al Dhaulagiri.
Aquel otoño, Carlos Soria logró alcanzar y pasar la noche a 7.600 metros de altura en la séptima montaña más alta de la Tierra. Pero las malas condiciones meteorológicas y la previsiones para el siguiente día, obligaron al alpinista abulense a abandonar su intento de hollar la cima del Dhaulagiri. La perfecta aclimatación permitió a Carlos Soria y sus compañeros permanecer a esa altitud varias horas.
Todo había comenzado en agosto con una expedición al valle de Ishinca en la que Carlos Soria ascendió dos de las tres montañas más importantes de la zona: el Urus (5420 m) y el Ishinca (5.530 m).
Junto con el Tocllaraju (6.034 m), estos tres picos son los mayores atractivos que posee la Cordillera Blanca en los Andes centrales de Perú. Comparten el mismo campo base, por lo que ofrecen una amplia gama de posibilidades de escalada.
Aunque están muy cerca una de la otra, poseen diferentes características desde el punto de vista técnico y estético. El Pico Urus, el más bajo de los tres, perteneciente al macizo del Chinchey, nos permitirá lograr una buena aclimatación para enfrentar los siguientes desafíos.
Se trata además del más rocoso y para su ascensión deberemos caminar primero por pendientes de hielo y nieve, para lo que se emplean crampones y piolet en la zona más alta. La subida al Nevado Ishinca, también de dificultad baja, permite disfrutar de una de las mejores vistas de todo el valle y sus alrededores.
El Tocllaraju completa este trío de montañas como una de las más bellas de todo el valle de Ishinca. Su forma piramidal muestra la verdadera dimensión de las montañas de Perú, unidas en torno a un hermoso valle cuyos paisajes van cambiando a medida que se avanza por sus senderos.
Por ello es uno de los lugares preferidos por los escaladores de todo el mundo que quieren iniciar la fase de aclimatación de sus expediciones en la Cordillera Blanca, y un paraíso para la escalada en hielo, ya sea para expertos o para principiantes.