Las primeras consecuencias del brexit para el Reino Unido
Durante los últimos meses se ha comentado mucho cuáles podrían ser las consecuencias de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, pero a día de hoy... ¿sabemos cuál ha sido el primer impacto? Miguel Jiménez, de BBVA Research, nos explica el impacto a corto, medio y largo plazo.
P.: ¿Cuál fue el primer impacto del brexit?
R.:El impacto inicial sobre mercados financieros fue bastante moderado. La única variable que se vio afectada permanentemente fue la libra esterlina, que se depreció bastante, pero todas las bolsas y las otras variables financieras se recuperaron rápidamente. Luego, en cuanto a la actividad económica, al principio se pensaba que iba a haber un impacto bastante importante sobre confianza y sobre actividad, pero los primeros indicadores que hemos recibido tanto de uno como de otro han sido relativamente buenos. Y aunque al principio se hizo una revisión de las perspectivas de crecimiento para el año que viene, la verdad es que ahora estas previsiones se están revisando al alza.
P.: ¿Cuál será el efecto a largo plazo?
R.: El brexit va a tener un efecto a largo plazo negativo, bastante negativo; la previsión que teníamos al principio la seguimos manteniendo. De cara al futuro, ya veremos cómo se producen las negociaciones. De momento, lo que está primando para el gobierno británico parece que es una salida dura. Lo que pasa es que ahora se ha complicado la situación porque tiene que negociar con el Parlamento, y tiene que votar la ley de salida (que probablemente no va a ser capaz de revertirla; aunque muchos parlamentarios están en contra del brexit, va a continuar hacia adelante). Pero, en cualquier caso, el resultado de las negociaciones es bastante incierto en este momento. Probablemente va a haber que esperar hasta marzo o más allá de marzo para saber el resultado.
P.: ¿De qué depende el tipo de impacto?
R.: El tipo de impacto y su magnitud van a depender del tipo de acuerdo que negocie Reino Unido con Europa. No solo con Europa, sino también con otro países, porque tiene que firmar muchos acuerdos comerciales. Si el tipo de acuerdo que hace es más o menos a la Noruega, es decir, muy cercano a la Unión Europea (permaneciendo en le mercado común europeo), probablemente el impacto será bajo; más o menos de 1 o 2 puntos de PIB en el muy largo plazo. Pero si lo que prima es un poco la voluntad política de controlar los flujos inmigratorios, que supone que no puedes permanecer en el mercado único europeo, pues probablemente el impacto será mayor. Esta segunda opción es lo que se llama un brexit duro, un “hard brexit”, como dicen ellos.