Las nuevas reglas de la FIFA que cambiarán el fútbol desde junio de 2019

La 133ª asamblea general de la International Football Association Board (IFAB), que tuvo lugar en Aberdeen (Escocia), ha dejado una serie de cambios importantes para el fútbol. Desde el 1 de junio de 2019 entrarán en vigor nuevas normas que, en cierta medida, cambiarán el desarrollo del juego en algunos aspectos destacados.

Las áreas, el principal foco

La primera gran medida es la supresión del concepto de voluntariedad o no de una mano cuando se ataca. Cualquier jugada que acabe en gol, y venga precedida de una mano, será anulada. Esto en fase ofensiva, en la defensiva siempre será penalti, salvo: brazos pegados al cuerpo, rebote en el defensa sin que las manos salgan del cuerpo e inercia en una mano cuando es a ras de suelo.

Una medida que, según la International Board, busca "afinar las leyes para el beneficio del juego" y, por tanto, proporcionar una "definición más precisa y detallada" de lo que supone dar la pelota con la mano. Además de este cambio, se acordó que cualquier jugador pueda tocar y jugar el balón dentro de su propia área tras un saque del portero.

¿Adiós al rechace en un penalti?

En la reunión en Escocia también se concretó la idea de suprimir el rechace en los penaltis. Es decir, el juego se parará si el portero o el palo rechaza el lanzamiento. Aunque este cambio será abordado en una nueva reunión. De momento, se ha dejado como una medida experimental y serán las ligas quienes soliciten si desean incluirlo, o no. Este tipo de experimentos se suelen probar en competiciones de menor categoría que una de las grandes ligas del mundo, entre las que se encuentra la Liga BBVA Bancomer.

Lo que sí ya cambia en un lanzamiento de pena máxima es que el portero ya no estará obligado a tener los dos pies sobre la línea de gol. Bastará solamente con tener uno. Una medida que intenta dar un poco más de facilidad al portero ante el penalti.

Además, aprobó que los futbolistas que vayan a ser sustituidos salgan por la línea más próxima que delimite el campo, con respecto a su posición. Es decir, ya no tendrá que salir por la línea de medio del campo de la banda situada en el lado de los banquillos. Lugar en el que se recuperan las tarjetas para los integrantes de los banquillos. Los entrenadores, y cualquier integrante de la banca, ya no serán apercibidos verbalmente; volverán a ver la amarilla, como amonestación, y la doble amarilla o tarjeta roja directa cuando sean expulsados.

El árbitro 'también juega'

Pero, ahí no queda la cosa. Hasta ahora, el balón podía golpear en el árbitro y el juego seguía; a partir de junio, si el balón toca en el árbitro, y éste está dentro del área, se para el juego y la pelota llega a manos del portero. Si pasa fuera del área, se le devuelve la pelota al último equipo que la tuviera en juego.

Por último, las barreras en una falta sólo podrán estar formadas por jugadores de un mismo equipo. Los rivales ya no podrán incrustarse dentro del muro defensivo, ahora tendrán que estar a un metro de distancia.

Digitalización del fútbol

El organismo también acordó continuar impulsando y ayudando a la implementación global del VAR. De la misma forma que implementará un programa de digitalización integral para apoyar en el proceso de educación del arbitraje y las leyes del juego.