Las claves del Acuerdo de Paz en Colombia

· El establecimiento de cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo, lo que implica que se acaban todos los ataques y amenazas a la población. Las Farc entregarán sus armas a las Naciones Unidas – mediante un cronograma ya anunciado– en un plazo de 6 meses. Este proceso será verificado y monitoreado por una comisión de las Naciones Unidas, con lo cual las Farc dejan de existir y se convierten en un movimiento político sin armas.

· La creación de una Justicia Especial para la Paz –con un Tribunal conformado por magistrados independientes–, que será aplicada también, en forma diferenciada, a los miembros de la Fuerza Pública y a civiles que hayan cometido delitos relacionados con el conflicto. Esta justicia transicional garantiza la no impunidad para los responsables de los delitos más graves, quienes serán investigados, juzgados y sancionados con varios años de restricción efectiva de su libertad. Además, tendrán que decir la verdad y contribuir a reparar a las víctimas. Si no lo hacen, irán a la cárcel hasta por 20 años.

· La puesta en marcha de un plan de inversión para el campo dirigido a superar la pobreza, la desigualdad y la violencia. Habrá programas de desarrollo para las zonas más golpeadas por el conflicto; un plan masivo de formalización de la tierra y se creará un Fondo de Tierras para distribuirlas de forma justa a quienes la perdieron durante los años de conflicto armado.

· La incorporación de las FARC a la vida política del país. El acuerdo garantiza una representación mínima de cinco senadores y cinco representantes a la Cámara durante los próximos dos períodos electorales. El nuevo partido que surja del tránsito de las Farc a la vida política legal deberá participar en los procesos electorales de 2018 y 2022 para asegurar una representación mínima en el Congreso de la República. Mientras las FARC estén en armas, no podrán participar en política. Una vez se firme el acuerdo final, si los colombianos avalan el plebiscito, las Farc tendrá unos  voceros en el Congreso “con voz pero sin voto” y estarán encargados de discutir exclusivamente la implementación de los acuerdos hasta el 2018.

· Las FARC se comprometen a romper cualquier vínculo que hayan tenido con el narcotráfico y a colaborar –con acciones concretas– en la solución de este problema. Se pondrá en marcha un Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos –que se construirá con las comunidades–, y se fortalecerán la lucha contra las finanzas ilícitas, así como, los programas de salud pública para enfrentar el consumo. También se incrementarán las acciones contra el microtráfico. Además, se llevarán a cabo programas conjuntos de desminado y limpieza del suelo.

Medidas para la reincorporación de los combatientes a la vida civil

Con el fin de que la reincorporación de los más de 6.000 combatientes que hacen parte de las Farc se haga de forma exitosa, el acuerdo contempla la realización de varias acciones como:

- Atención a los derechos en salud, acompañamiento psicosocial, educación y reunificación de núcleos familiares, entre otros.

- Apoyos económicos excepcionales y transitorios para la estabilización económica de estas personas una vez hayan hecho la dejación de armas y el tránsito a la legalidad.

- Apoyos excepcionales, transitorios y diferenciados para la construcción de iniciativas de carácter individual y asociativo como la organización de Economías Sociales del Común (ECOMÚN).

Para verificar que los integrantes de las Farc cumplan con las condiciones de reincorporación y no vuelvan a delinquir, se estableció la creación del Consejo Nacional de Reincorporación, que será una instancia conjunta entre el Gobierno Nacional y las Farc, la cual tiene como uno de sus objetivos realizar el seguimiento al proceso de reincorporación.  Adicionalmente,  se crearán Consejos Territoriales de la Reincorporación que realizarán el seguimiento a la reincorporación en los diferentes territorios.

Verificación internacional

Así mismo, se acordó crear un mecanismo de verificación de los acuerdos que tendrá un componente internacional y que estará liderado por una Comisión de la ONU, que se encargará de verificar el cumplimiento del cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo por un período de tres años, renovables si fuera necesario,   y de varios países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac).

El country manager de BBVA Colombia, Óscar Cabrera, afirmó con respecto al acuerdo firmado entre el Gobierno del Colombia y las FARC  que: "No hay duda que la firma de este Acuerdo de Paz es una gran noticia para el país, que nos permite encarar el futuro con más optimismo y con la certeza de que vamos a construir un futuro mejor para los colombianos".