Las siete cumbres de los siete continentes con 70 años
En muchas culturas el 7 es un número que trae suerte. Siete son los días de la semana y los mares del planeta. Según la Biblia, Dios tardó siete días en crear la Tierra y para los hindúes son siete los chacras o puntos de energía que tiene el cuerpo. Siete vidas tiene un gato, las siete maravillas del mundo, los siete pecados capitales, los siete colores del arcoíris, las notas musicales y hasta los enanitos de Blancanieves.
Superstición o no, para Carlos Soria el número 7 ha sido importante en su vida y se convirtió en todo un reto que logró superar. En 2010, el veterano alpinista logró una curiosa, mágica y difícil hazaña: subir a las siete montañas más altas de cada uno de los siete continentes. Para redondear este hito lo hizo con nada más y nada menos que con 70 años.
Carlos Soria durante la ascensión al McKinley (1971)
Esta aventura comenzó allá por 1968. Por aquel entonces Carlos no sospechaba que el alpinismo se convertiría en un modo de vida para él. El monte Elbrus (5.642 m) fue su primera expedición importante y la primera española que viajaba hasta Rusia cuando nuestro país era hasta ese momento mero espectador en el mundo de la montaña. Carlos y sus compañeros llegaban al techo de Europa y ahí empezaba la leyenda.
El siguiente paso fue hollar la cima de Norteamérica, el monte McKinley (6.194 m) en Alaska en 1971. Según el propio Carlos, no era tarea fácil organizar este tipo de expediciones en esos años: “Era mucho más difícil organizar una expedición en ese momento. Era necesario mucho dinero y un gran trabajo preparatorio por la falta de medios de comunicación. Hoy, se hace todo eso en un cuarto de hora con un teléfono móvil”. Después llegaría el Aconcagua (6.960 m) en 1986.
Tendrían que pasar 15 años hasta que Carlos tachara de su lista la cima de Asia: el Everest (8.848 m). En 2001 y con 62 años, Carlos Soria ya era un referente en el alpinismo mundial y fue a partir de este momento cuando decidió embarcarse en el reto de los 14 ochomiles.
No fue hasta 2007 cuando se planteó el conseguir las siete cimas de los siete continentes: “El reto de lograr las cumbres de los siete continentes tenía más de mágico que de deportivo. Me parecía algo bonito para celebrar mis 70 años y muy especial sin duda. Además me ha permitido viajar y conocer culturas muy diversas, que es una de las cosas que más me gustan en la vida”, afirma Soria.
Viajar hasta la Antártida en 2007 para subir al monte Vinson (4.897 m) o llegar a la pirámide de Carstensz (4.884 m) en la parte indonesia de la isla de Papúa fueron realmente viajes apasionantes para Carlos y guarda grandes momentos grabados en su mente: “Fueron seis días en total, tres de ellos de selva, de lluvia y barro hasta las orejas. Atravesamos una parte de selva y cruzamos por varias tirolinas. No fue técnicamente difícil pero la lluvia y el barro era lo más complicado de gestionar”.
El broche de oro a este reto lo pondría unos días antes de cumplir los 70 años. El 23 de enero Carlos Soria llegaba a la cima africana del Kilimanjaro (5.891 m) y cerraba el círculo logrando las siete cimas de los siete continentes. Pero Carlos es un inconformista profesional. Como insaciable deportista y con su buen estado físico, el abulense se dispuso a afrontar el mayor reto su vida, los 14 ochomiles. Y estamos seguros que lo logrará.
La magia del 7
1968 – Elbrus, Europa (5.642 m)
1971 – McKinley, América del Norte (6.194 m)
1986 – Aconcagua, América del Sur (6.960 m)
2001 – Everest, Asia (8.848 m)
2007 – Vinson, Antártida (4.897 m)
2009 – Carstensz, Oceanía (4.884 m)
2010 – Kilimanjaro, África (5.891 m)