La tendencia de los españoles a residir en viviendas alquiladas se mantiene al alza
El último documento Esenciales de la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) revisa la situación actual del mercado de la vivienda español, que ha experimentado profundos cambios en la última década. Desde el estallido de la burbuja inmobiliaria, ser propietario de una vivienda ha dejado de ser la opción preferida de los españoles en favor del alquiler.
Los españoles prefieren alquilar a adquirir una vivienda pese a la caída del precio de compra en 21 puntos porcentuales tras la crisis económica de 2007. De esta forma, el porcentaje de hogares que residen en viviendas en alquiler ha aumentado cuatro puntos porcentuales para el periodo 2007-2018 (desde el 14% en 2007, al 18% en 2018).
Además, el análisis regional del alquiler de la vivienda indica que, en todas las comunidades autónomas españolas, ha aumentado el porcentaje de personas que residen en viviendas alquiladas. Si bien, la diferencia porcentual entre unas y otras es muy notable: el porcentaje de Canarias casi triplica al de Extremadura.
En concreto, mientras el porcentaje de viviendas en alquiler ha aumentado de forma acusada en Canarias, Baleares, Cataluña y Madrid, lo ha hecho de forma mucho más leve en Cantabria, Castilla-La Mancha y Extremadura.
Paradójicamente, el número de viviendas en alquiler va en aumento en un momento en que el precio del alquiler se encuentra al alza y el de compra se mantiene por debajo de lo alcanzado en 2007. Respecto al precio del alquiler, ha incrementado en 11 puntos porcentuales desde 2007 y las comunidades autónomas que más lo han acusado son Cataluña, Cantabria y Baleares.
Al aumento del precio del alquiler hay que sumar la mayor dificultad de los españoles para acceder a la vivienda en alquiler. La tasa de asequibilidad (que se corresponde con la proporción de hogares que emplean el 40% o más de su renta disponible a la vivienda) es bastante mayor que la media europea, un 43% frente al 28%.
Por el contrario, las estadísticas indican que la accesibilidad a la compra de una vivienda ha mejorado desde que comenzó la crisis, ya que el precio de la vivienda ha caído más de un 20% y la renta per cápita ha aumentado un 8,8% desde 2007 hasta hoy. Es decir, si antes un español, de media, necesitaba destinar la renta de 13,6 años para pagar una vivienda, en la actualidad necesita 9,7 años.
Para comprender esta paradoja, los siguientes factores son clave. Los españoles preferimos alquilar en lugar de comprar una vivienda debido al elevado precio de la vivienda en relación a los salarios, el alto porcentaje de empleo temporal, la tasa de desempleo, o sencillamente debido a las nuevas preferencias de los jóvenes.
Ahora bien, si se compara el mercado de la vivienda español con el de la UE, el análisis cambia notablemente, ya que España supera el promedio de hogares que residen en una vivienda en propiedad (un 77,1% frente al 69,3% de la UE). Sin embargo, el porcentaje en España de personas que viven en viviendas alquiladas es 5,6 puntos inferior a la media de la UE (un 14,4% frente al 20%).
Por último, el informe de la Fundación BBVA y del IVIE indica que el esfuerzo de un habitante español para adquirir una vivienda sigue siendo superior en comparación con el resto de Europa y, por ello, “es necesario incentivar la oferta de viviendas en alquiler, sobre todo pensando en los colectivos que tienen más dificultades en el acceso”.