Cerrar panel

Cerrar panel

Cerrar panel

Cerrar panel

Análisis Regional Act. 25 oct 2018

La recuperación de la economía en América Latina se pospone para 2019

BBVA Research ha revisado a la baja las previsiones de crecimiento de Argentina, Brasil, México y Uruguay para 2018, con lo cual, la proyección promedio del Producto Interno Bruto de América Latina también se reduce a 0,9%, desde 1,3% de la previsión anterior.

buenos-aires-city-fintech-finanzas-argentina-banco-frances-bbva

De acuerdo con el informe ‘Situación América Latina 4T18’, la región recobrará el dinamismo en 2019, año para el cual se estima un crecimiento de la economía de 1,8%. A partir de 2020, el Producto Interno Bruto (PIB) se acercará a su potencial (entre 2,5% y 3%).

Juan Ruiz, economista jefe de BBVA Research para América del Sur, ha señalado que "la región presenta perspectivas económicas muy heterogéneas, con crisis en Argentina, incertidumbre en Brasil y resiliencia en los países de la Alianza del Pacífico".

En general, el crecimiento en 2018 y 2019 estará apoyado principalmente por el sector externo, en un entorno económico global más robusto

Ruiz explicó que se redujo la proyección para Argentina por la crisis cambiaria y las necesarias políticas monetaria y fiscal restrictivas. Este país se vio afectado de manera importante por la volatilidad de los mercados internacionales. Por su parte, las menores estimaciones para Brasil (que también se ve lastrado por la volatilidad financiera), México (en donde disminuye la incertidumbre después del preacuerdo comercial con EE. UU. y Canadá) y Uruguay son fruto de los malos datos de crecimiento en el primer semestre del año.

Por el contrario, las previsiones de crecimiento para Chile y Paraguay se incrementan, dados los buenos resultados en la primera parte del año, en tanto que las de Colombia y Perú se mantienen sin cambios.

En general, el crecimiento en 2018 y 2019 estará apoyado principalmente por el sector externo, en un entorno económico global más robusto y precios favorables de algunas materias primas como el petróleo y el cobre.

Alza en tipos de interés a la vista en la mayoría de países

La inflación se mantiene acotada en los países de América Latina, a pesar de las depreciaciones recientes de los tipos de cambio y la recuperación de la demanda interna. La excepción a la regla es Uruguay y Argentina. En este último país los precios aumentan de manera importante por el efecto de la depreciación reciente de la tasa de cambio.

En este escenario de precios estables, de retirada de los estímulos monetarios en EE. UU. y de recuperación del crecimiento, se prevé que los bancos centrales de los diferentes países aumenten las tasas de interés en 2019 (Chile ya inició el proceso la semana pasada), excepto en Argentina y México, en donde se presentarán reducciones a lo largo del próximo año.

Teniendo en cuenta que prácticamente todas las divisas se han depreciado en 2018, salvo la de México, se prevén pequeñas apreciaciones de las monedas de la región, las cuales se verán apoyadas por un mayor crecimiento y el inicio del ciclo de ajuste monetario.

Según BBVA Research, el mejor crecimiento y los ajustes fiscales permitirán la reducción del déficit público en algunos países como Chile, Colombia, Brasil y Argentina. Por el contrario, se espera que aumente ligeramente en México y Paraguay, aunque se mantendrá en niveles bajos.

Los riesgos asociados al proteccionismo aumentan

Desde el punto de vista externo, el proteccionismo y su impacto en los flujos comerciales globales y sobre los precios de las materias primas son factores que incrementan los riesgos en la región. A esto se suma el endurecimiento de las condiciones financieras internacionales y el riesgo de una desaceleración brusca de la economía china, que podría poner freno a la compra de bienes y materias primas proveniente de América Latina.

En cuanto a los riesgos internos, hay heterogeneidad entre los países. Por un lado, el ruido político muestra una tendencia al alza particularmente en Argentina, en donde también hay tensiones financieras, pero también en Colombia y Perú; mientras en Brasil, Chile y México se estabilizan. Por otro lado, existe el riesgo de un retraso mayor en la inversión tanto pública como privada en varios países. así como el riesgo de que no se impulsen las reformas para potenciar la productividad.