La economía colombiana prueba su capacidad de resiliencia
La industria y la construcción serán los sectores que liderarán la dinámica de la economía colombiana en 2016, según el informe Situación Colombia de BBVA Research correspondiente al primer trimestre de 2016,
La economía colombiana ha mostrado su capacidad de resiliencia al enfrentar el choque petrolero, al cual se ha visto enfrentada en los últimos meses. La economía ha mantenido tasas de crecimiento promedio desde 2013 y hasta 2015 del 4,1% y creemos que la economía seguirá resistiendo este embate con una desaceleración gradual y ordenada, sin mayores traumatismos, pero sí con un crecimiento menor que estimamos entre el 2% y 3% en 2016 y 2017, respectivamente.
En 2016, los sectores que sustentarán el desempeño de la economía serán la expansión que experimentará el sector industrial, que estimamos superé el 7%, gracias a la apertura de REFICAR. La construcción también será otra fuente de impulso para este año, apoyada por la construcción de vivienda de interés social y de clase media. En 2017, el relevo en el liderato del crecimiento lo tomará las obras civiles, año donde se consolidará el avance de todas las obras estructuradas bajo la primera ola de concesiones.
Tasa de cambio
Así mismo, vemos que la flexibilidad de la tasa de cambio ha sido clave en esta coyuntura. La depreciación que se registra desde 2013 ha sido la más fuerte desde que se instauró el régimen de cambio flotante, y ha servido para amortiguar los menores ingresos de exportación y ayudar a cerrar el déficit en cuenta corriente. Sin dicha flexibilidad cambiaria, los desbalances internos y externos hubieran sido más pronunciados, implicando un mayor ajuste en el consumo posteriormente.
Esperamos que el tipo de cambio siga ayudando al ajuste de la economía en 2016, con un tipo de cambio promedio de COP 3.306. En 2017, cuando el precio del petróleo se recupere, se devolverá a niveles promedio de COP 2.873.
Por otra parte, el balance externo muestra signos de corrección a pesar de que el déficit en cuenta corriente se va a ubicar alrededor del 6,7% como porcentaje del PIB en 2016 y 2017. En dólares, el déficit en 2016 será de USD 17.800 millones, cifra inferior a los USD 19.600 millones de 2015. Sin embargo, debido a la caída del PIB en dólares por la depreciación, su valor como porcentaje del PIB no refleja esta mejoría.
Actualmente, Colombia exporta crudo a cerca de un tercio del valor de 2013 y como resultado la tasa de cambio se ha depreciado 77% desde entonces, el déficit de la cuenta corriente y el déficit fiscal, a pesar de los recortes de gasto que ha hecho el Gobierno, se han ampliado.
Fenómeno del Niño y su impacto sobre la inflación
Por otra parte, la inflación seguirá aumentando en el primer semestre del año debido a la tasa de cambio y al encarecimiento de los alimentos que provocó el fenómeno climático de El Niño. Lo anterior, sumado a la indexación de los precios a la inflación retrasará la convergencia de la inflación al rango meta. Así, esperamos que la inflación termine el 2016 en una tasa de 5,4% y el 2017 en una tasa de 3,7%.
En esta coyuntura, el reto del Banco Central será lograr el sutil balance entre el retorno de la inflación y las expectativas de inflación a la meta y que a su vez, el ajuste de la economía no sea excesivo. Lograr dicho balance no es una tarea fácil, y dado los riesgos actuales sobre el desanclaje de las expectativas, esperamos movimientos adicionales de la tasa repo hasta el 7% en los próximos meses.
A nivel fiscal, el reto de las autoridades consiste en reemplazar los ingresos tributarios de las actividades minero-energéticas. El Gobierno ya ha hecho algunos ajustes en su gasto respondiendo a esta nueva realidad. Sin embargo, estos esfuerzos no son suficientes y es necesario que sus ingresos aumenten, para lo cual, el Gobierno ya anunció que tramitará una reforma tributaria en la segunda parte de este año.
Juana Téllez es economista jefe de BBVA Research Colombia.