La batalla de Aubrey de Grey para frenar el envejecimiento
Mitos, leyendas e historias de personajes bíblicos y de ficción; elixires mágicos y fuentes con propiedades curativas. La eterna juventud ha sido, desde el principio de la historia, un anhelo que ha obsesionado a la humanidad y uno de los principales desafíos de la comunidad médica. Más allá de toda fantasía, el gerontólogo Aubrey de Grey investiga cómo alargar la vida de las personas para que, en un par de décadas, podamos elegir si queremos envejecer o no.
El experto pasa sus días entre Cambridge y Sillicon Valley. La universidad británica y la Fundación SENS (Strategies for Engineered Negligible Senescence) son los escenarios donde de Grey desarrolla las investigaciones que le han llevado a afirmar que algunas personas –que hoy están vivas- llegarán a cumplir 1.000 años.
“Creo que estamos muy cerca de tener un conocimiento médico completo del envejecimiento”, afirmó el científico en la presentación del libro El próximo paso: la vida exponencial, publicado por BBVA dentro de su iniciativa OpenMind, y que puede descargarse gratuitamente en varios formatos electrónicos.
El biogerontólogo Aubrey de Grey
Esa es, precisamente, la clave para detener las consecuencias del paso del tiempo: conocer sus causas. De Grey explica la vejez como una serie de cambios en el metabolismo que deterioran, de forma progresiva, el organismo.
“Por fin tenemos un buen plan para resolver, en 20 o 30 años, una de las preguntas que la humanidad se ha estado haciendo desde los albores de la historia - y para la que nunca antes hemos tenido idea sobre la respuesta-“, señala el experto.
Para poner sus teorías al alcance de todos, de Grey trata de explicarlas de forma sencilla. Tal y como hizo en una charla de TED, donde pidió a los asistentes que levantasen la mano si estaban a favor de la malaria. Nadie lo hizo, justo como el científico esperaba. En realidad, quería demostrar que el envejecimiento debería ser tratado como cualquier otra afección: una enfermedad a la que hay que buscar cura.
El científico está seguro de que, esta vez, están siguiendo el camino correcto y compara la cura del envejecimiento con un coche viejo que hay que reparar cambiando las piezas estropeadas. O, lo que es lo mismo, reparando los daños. La tecnología empieza a poner al servicio de la ciencia herramientas que permiten prolongar la vida. Es el caso de la bioimpresión, que produce réplicas artificiales de tejidos y órganos.
Eso sí, “la cura del envejecimiento vendrá en diferentes etapas”, advierte de Grey. "Cada persona envejece de manera diferente, porque todos acumulamos distintos tipos de daños en el cuerpo y a un ritmo desigual”, añade. Los científicos identifican siete tipos de daños relacionados con la edad (los mismos desde 1982), para los que ya hay mecanismos de reparación.
Aubrey de Grey no está solo. Cada vez más colegas apoyan sus teorías, las mismas en las que ha invertido gran parte de su propia fortuna. No solo los expertos creen en vivir más años; también Google, que anunció en 2015 la inversión de casi 500 millones de dólares en buscar herramientas para frenar el envejecimiento. Bill Maris, socio fundador de Google Ventures, dijo en una entrevista a Bloomberg que ya disponemos de las herramientas para vivir 500 años y que solo esperaba “vivir lo suficiente para no morir”.