Kevin Durant ficha por los Golden State Warriors
Kevin Durant ha deshojado la margarita y se ha decidido por los Golden State Warriors. El alero de 2,06 metros y 27 años jugará la próxima temporada en la franquicia de La Bahía. El equipo del récord (73-9), de Stephen Curry y Klay Thompson, el que maravilló al mundo con un baloncesto eléctrico aunque finalmente no pudiera alzar la NBA tras caer en la final ante los Cavaliers de LeBron James.
Durant firma por dos temporadas, aunque hay que decir que la segunda es opcional por parte del jugador, y 54,3 millones de dólares. "He decidido que voy a unirme a los Golden State Warriors", escribió el embajador de BBVA en The Players Tribune, publicación en la que Kobe Bryant anunció su adiós definitivo al mundo del baloncesto.
"Soy de Washington D.C., pero Oklahoma City fue donde realmente me crié. Me enseñó mucho acerca de la familia, así como lo que significa ser un hombre. No hay palabras para expresar lo que la organización (Thunder) y esa comunidad significan para mí, y lo que va a representar en mi vida y en mi corazón para siempre. Los recuerdos y las amistades son algo que va mucho más allá del juego. Esas relaciones invaluables son lo que hizo esta deliberación tan desafiante", afirma un Durant que promedió 28,2 puntos, 8,2 rebotes y 5 asistencias por partido en los 72 jugados.
My next chapter https://t.co/DG2TJ5cnev pic.twitter.com/zi94ss9NWI
— Kevin Durant (@KDTrey5) 4 de julio de 2016
El MVP en 2014 abandona la franquicia en la que ha triunfado tras ser drafteado en 2007 en el puesto número 2 por Seattle SuperSonics. Su salida constituye un fuerte impacto en la mejor liga de baloncesto del mundo ya que eran múltiples los equipos —Spurs, Clippers, Celtics, Heat y los propios Thunder— que pretendían hacerse con los servicios de uno de los mejores aleros de la competición.
"Realmente me duele saber que voy a defraudar a mucha gente con esta elección, pero creo que estoy haciendo lo que siento que es correcto en este momento de mi vida y de mi carrera como jugador", continúa.
En sus siete años en la NBA, Durant solo ha jugado unas Finales de la NBA. Ante los Heat de Lebron y Wade cayó de forma contundente por 4-1 en 2012. Por tanto, llega a un equipo en el que puede conseguir su gran deuda pendiente: el título.