La segunda ‘calle bitcoin’ del país, en Barcelona
Un grupo de convencidos de las ventajas y potencialidades de la criptomoneda Bitcoin ha decidido crear en Barcelona una “calle bitcoin”, a imitación de la iniciativa que ya se implantó hace unas semanas en Madrid, y que permite a los clientes de más de 20 comercios de la comercial calle Serrano (en la conocida ‘milla de oro’ madrileña) poder realizar sus compras con esta divisa tan polémica como popular.
El objetivo de la creación de una segunda 'calle Bitcoin' en España, la primera en Madrid y esta segunda en Barcelona, es conseguir que un mayor número de comercios de una misma zona ofrezca esta nueva forma de pago a sus clientes.
En el distrito de Ciutat Vella, una calle con comercios "distanciados entre sí por menos de 500 metros", de la que aún no se ha revelevado el nombre, va a convertirse en la segunda 'calle Bitcoin' en España. Pero, ¿por qué en Ciutat Vella? Por su condición turística, su localización céntrica y su alta concentración comercial, nos aclara Borja Rossell, uno de los promotores de la iniciativa y CEO de BTCpoint, una startup dedicada a la producción e instalación de cajeros bitcoin.
La iniciativa cuenta con una quincena de voluntarios que ha comenzado su ronda de contactos por los comercios. Su meta es contar con 20 o 30 comercios, concentrándose más en los pequeños negocios que en las franquicias, ya que estos pueden ser más susceptibles de innovar en lo que respecta a medios de pago. Los promotores quieren dejar claro a los comerciantes que este cambio no supondrá coste alguno para ellos.
La intención es que la iniciativa esté lista para que los consumidores puedan empezar a operar con bitcoins coincidiendo con el Mobile World Congress que tendrá lugar en la Ciudad Condal del 2 al 5 de marzo de 2015: un momento en el que Barcelona se convertirá -como ha hecho en ediciones anteriores- en referencia mediática del sector tecnológico a nivel mundial gracias a sus aproximadamente 70.000 visitantes. Esto permitirá aumentar el impacto de la puesta en marcha de la ‘calle Bitcoin’. Además, como señala Carrerbitcoin.com, “en la próxima edición, los métodos de pago como el Bitcoin serán una de las novedades como forma de pago móvil”.
Algo parecido se intentó hacer en la edición de este año instalando un cajero automático de bitcoins en uno de los centros comerciales de la ciudad. Pero esta iniciativa, lanzada por la compañía barcelonesa PayMaQ junto a Bbank en un momento en que sólo Vancouver (Canadá) y Helsinki (Finlandia) contaban con algo similar, tuvo un enfoque meramente provisional. Eso sí, desde el pasado día 25 de noviembre Barcelona cuenta con un cajero bitcoin permanente instalado por la compañía BTCPoint.
Este cajero se encuentra situado en el FabCafé, una cafetería dotada de impresoras 3D a disposición de los clientes que se localiza dentro del MOB, un espacio de coworking en el que tuvo lugar la primera reunión de voluntarios del proyecto el día 10 de noviembre, previamente convocada en los foros de BitcoinTalk.org. Este cajero permitirá comprar o vender bitcoins operando por el momento exclusivamente en efectivo, y sujeto al límite de 2.500 euros marcado por la legislación española.
A día de hoy y a la espera del éxito de la que sería la segunda ‘calle Bitcoin’ del país, sólo una veintena de comercios de la capital catalana acepta pagos con bitcoins, y únicamente existe un establecimiento en el cuál poder hacer el cambio de euros a bitcoins (el citado FabCafé). Estas cifras indican que la implantación de esta tecnología estaría muy por detrás de la que podemos observar en las grandes capitales mundiales.
Bitcoin es una moneda digital que permite la realización de transacciones encriptadas a nivel global y usando para ello medios exclusivamente electrónicos, sin presencia de intermediarios ni comisiones, y sin vinculación a ningún país ni banco en concreto. Su valor se sitúa a día de hoy entre los 400 y los 500 euros la unidad, pero es variable (dado que depende del uso que le den sus usuarios en el mercado). La emisión de unidades bitcoin depende de un algoritmo que, para garantizar la estabilidad de la moneda, limita su cantidad a únicamente 21 millones de bitcoins en el mundo.