¿Qué son las ‘superapps’? El nuevo modelo digital de aplicaciones
El mercado digital de las ‘apps’ evoluciona. En Asia y América Latina ya son una realidad las ‘superapps’, aquellas que reúnen en un solo lugar todo lo que el usuario necesita. Los servicios financieros son una de sus puntas de lanza, a partir de la cual ofrecen redes sociales, reparto de comida a domicilio o reserva de transporte.
Si una persona en Europa quiere, a través de su móvil, pedir un servicio de transporte, ordenar comida a domicilio, renovar el seguro del coche o hacer una transferencia bancaria a un amigo, debe tener instaladas varias ‘apps’ distintas. No es el caso si esa persona reside en Asia o en América Latina. Todos esos servicios y algunos más están disponibles a través de una sola macro aplicación, también llamada una ‘superapp’. Aplicaciones como WeChat en China o Rappi en Colombia y otros países americanos se han convertido en una parte esencial del día a día de los ciudadanos. Gracias a ellas disponen de todos los servicios en un solo lugar.
“Son un nuevo modelo en el ámbito de las ‘apps’ y el negocio digital”, explica Nacho de Pinedo, CEO de la escuela de negocios ISDI, especializada en negocio digital. El experto asegura que las ‘superapps' son la evolución natural de algunos grandes actores digitales como Amazon y Aliexpress, así como una solución confortable para los usuarios. “El cliente obtiene la comodidad de acceder a numerosos servicios a través de una sola ‘app’ en la que la experiencia de uso es conocida. Se ahorra bajar otras aplicaciones, familiarizarse con sus dinámicas de uso, introducir datos personales o de pago varias veces y tener historiales de interacción en diferentes sitios”.
Estas ‘superapps' nacieron en su momento con algunos servicios concretos (WeChat apostaba por ser el WhatsApp asiático mientras Rappi se centraba en envío de comida a domicilio) pero han ido poco a poco incorporando muchos otros servicios. Hoy, con una ‘app’ como Rappi, un usuario colombiano puede pedir comida, tomar un taxi, reservar un patinete eléctrico, abonar el SOAT (seguro obligatorio de circulación del coche), pedir un ‘rappi favor’ (que alguien venga a casa a sacar a su mascota) y hacer una transferencia con Rappipay. Los pagos son, sin duda, una de las apuestas más fuertes en regiones con una baja inclusión financiera. “Estas ‘apps’ permiten realizar pagos en mercados en los que es crucial generar un ecosistema de comercio que permita aplazar, dividir cuantías y evitar las tarjetas de crédito”, explica De Pinedo.
El surgimiento de estas ‘apps’ en regiones como Asia y América Latina se debe, según señala De Pinedo, a que la población “ha accedido a internet directamente desde las apps”, mientras en Europa y América del Norte “los grandes servicios digitales se construyeron desde la época anterior al móvil”. Según datos de la organización de operadores de móviles GSMA, unos 422 millones de ciudadanos de América Latina serán usuarios de internet en el móvil en 2025, con una penetración del 64% de la población. China, principal mercado móvil de Asia y del mundo con 1.200 millones de clientes, llegará a tener una penetración del uso de redes móviles que alcanzará al 88% de la población.
"El cliente se ahorra bajar otras aplicaciones, familiarizarse con sus dinámicas de uso, introducir datos personales o de pago varias veces y tener historiales de interacción en diferentes sitios"
En Europa y Estados Unidos todavía ningún actor digital ha apostado por reunir en un solo lugar todos los servicios. El primer ejemplo se está dando en Rusia. Se trata de Tinkoff, un banco digital ruso, que ha lanzado en periodo de prueba su ‘superapp’. En ella quieren ofrecer, además de todos sus servicios financieros, servicios de ocio, de transporte o incluso belleza y bienestar.
‘Superapps', mirando al mercado financiero
Una de las revoluciones que presentan este tipo de negocios son los servicios financieros. WeChat permite a sus clientes una serie de opciones relacionadas con el ‘social ecommerce’. Además de poder enviar una transacción a otro usuario móvil (como sucede con Bizum), se puede comprar una casa o contratar una hipoteca.
En relación con el sector bancario, un informe de la consultora KPMG apunta que, mientras los bancos realizan actividades reguladas, estas ‘superapps' retienen la experiencia y la relación con el cliente.
Las ‘superapps' tienen acceso a tal cantidad de datos de sus clientes, que son capaces de anticiparse a sus necesidades y cada vez los conocen mejor. “Están utilizando sus datos para dirigir mejor los productos financieros a los clientes, en el momento exacto en que los necesitan”, detalla KPMG.
La consultora recomienda a los bancos arriesgar en aquellos mercados en los que todavía no hay ‘superapps' que lideren estos servicios y apostar por juntarse con actores locales, abrir su arquitectura programática a través del ‘open banking’ y las APIs y crear una ‘superapp’ de servicios financieros.
BBVA ya ha dado algunos importantes pasos en esta línea, como por ejemplo, con el acuerdo firmado con Uber en México, donde presta servicios financieros a todos los conductores asociados desde la propia ‘app’ de la VTC o con el lanzamiento de su plataformas de ‘open banking’ en Estados Unidos y España. Paralelamente, la ‘app’ de BBVA incorpora una variedad funcionalidades que van más allá de los puros servicios financieros como el asesoramiento a la hora de comprar o alquilar una casa a través de Valora o un asesoramiento del gasto con Bconomy.
De hecho, la versatilidad de las funcionalidades orientadas a mejorar la situación financiera de sus clientes, ha sido un factor determinante para que Forrester nombrase a BBVA como líder mundial en banca móvil por tercer año consecutivo.