Más allá de la medicina: así serán los humanos modificados con IA
Para el profesor Kevin Warwick, experto en cibernética de la Universidad de Reading, el futuro de los humanos está literalmente ligado a la inteligencia artificial, con tecnologías que permitirán conectar nuestros cerebros a las máquinas y aumentar así nuestras capacidades físicas y psíquicas. Así lo cuenta en una entrevista con OpenMind, la comunidad del conocimiento de BBVA.
Un paciente de Parkinson aparece en la pantalla. Visiblemente en una fase avanzada de la enfermedad, no puede controlar los temblores de sus brazos en reposo y necesita la ayuda de otra persona para incorporarse de la silla y mantenerse en pie. Se produce un lapsus de tiempo, y aparece otra imagen del mismo paciente, después de que el equipo del profesor Alim Louis Benabid le haya implantado un neuroestimulador. El hombre comienza a recibir estímulos en su cerebro, y sus temblores cesan. Se reposiciona en su silla para ponerse cómodo. Levanta su brazo de derecho, y mueve sus dedos de forma controlada. Hace lo mismo con el brazo izquierdo. Se levanta. Da un paseo por la sala.
La Estimulación Cerebral Profunda es un ejemplo de que la implantación de electrodos en el cerebro humano ha dejado de ser ciencia ficción y podría convertirse en un tratamiento efectivo — se encuentra en fase de experimentación— para enfermedades neurodegenerativas. Pero para Kevin Warwick, autor en OpenMind, es cuestión de tiempo que los humanos vinculen sus cerebros con sistemas de inteligencia artificial para ampliar sus capacidades, más allá de las aplicaciones médicas que se están explorando en la actualidad.
En la entrevista con OpenMind, Warwick analiza el futuro de la inteligencia artificial aplicada a los seres humanos. “Para mí, el camino correcto sería el de los humanos mejorando sus capacidades gracias a la inteligencia artificial. La alternativa –tener máquinas que sean más inteligentes que los humanos– es muy peligrosa”. Algunas de las posibilidades que menciona el profesor podrían ser la mejora de la memoria, extensiones del cuerpo humano que controlaríamos con la mente desde el otro lado del planeta, una comunicación cerebro a cerebro o el desarrollo de nuevos sentidos, como la ecolocalización.
“Entenderemos el mundo que nos rodea de una manera mucho más compleja, igual podremos entender más dimensiones – una ventaja de la inteligencia artificial – y seremos capaces de viajar por el espacio, cosa que por el momento no podemos hacer porque pensamos en tres dimensiones, lo cual restringe bastante nuestra capacidad intelectual”.
Haz clic aquí para leer la entrevista completa al profesor en la web de OpenMind.
Kevin Warwick durante el foro organizado por OpenMind y el Diario Sur - Diario Sur