Big data, esa palabra que puede causar temor al haber sido utilizado desde hace años sin explicar realmente en qué consiste, tiene muchas más aplicaciones prácticas de las que nos podemos imaginar. Quizá sea por su similitud fonética con el tópico del big brother, pero a diferencia de éste, el big data se está desarrollando con fines más que positivos en muchos y diversos ámbitos. En este artículo hablamos de algunos de ellos, con ejemplos de cómo la sociedad se beneficia a través del análisis de la cantidad ingente de datos que generamos cada día.
Para empezar, ¿qué es exactamente big data? Es el término que describe el conjunto de procesos, tecnologías y modelos de negocio que están basados en datos y en capturar el valor que esos datos encierran. Big data ofrece mejoras de eficiencia gracias al análisis de los datos, así como la posibilidad de crear nuevos servicios y modelos de negocio que supongan un motor de crecimiento.
En este entorno digital en el que nos encontramos, casi cualquier actividad que realizamos, deja un rastro digital. Comprar unos pantalones, repostar en una gasolinera, enviar un whatsapp, hacer la compra por Internet,... Así, sin darnos cuenta, generamos una enorme cantidad de información que correctamente analizada, puede facilitarnos mucho la vida.
Uno de los puntos clave en la transformación digital es el uso inteligente de la información. Y es así en todas las empresas, grandes o pequeñas, que operan con éxito en el ámbito de una economía que tiene un reflejo total y permanente en el plano digital e incluso a veces va más allá. BBVA emplea analítica avanzada de datos de manera integrada en sus diversas unidades de negocio para impulsar su transformación.
Las grandes compañías, poseen muchos datos que, al no ser analizados, se perdían sin aportar nada de valor. Por eso, BBVA creó BBVA Data & Analytics, centro de excelencia en analítica de datos del Grupo, con el objetivo de aportar las competencias profesionales y científicas con las que ya cuentan algunas de las empresas nativas digitales de mayor éxito y que se encuentran en el núcleo de las transformaciones sectoriales. Desde aquí, se trabaja en ámbitos como el conocimiento del cliente, la detección y prevención de fraude, análisis de riesgos, y en general en la mejora de procesos internos y en el impulso de una mejor experiencia y mejores servicios para los clientes. BBVA lleva años trabajando en ello para mejorar los servicios financieros y desarrollar nuevos productos.
Pero big data, además, puede ser de gran ayuda para pequeños comercios y pymes a través de Commerce360, un nuevo sistema que puede dotarlos de inteligencia comercial a partir del análisis de datos transaccionales de TPVs y tarjetas (siempre de manera anónima, estadística y agregada para proteger la privacidad de los clientes). Este servicio permite ayudar a los comercios en la gestión diaria de su negocio y aumentar su satisfacción a través de un servicio diferencial. Con Commerce360, una tienda puede decidir sobre asuntos como los horarios comerciales, apertura de nuevos comercios, segmentación de ofertas comerciales (por zona, día, segmentos de cliente), campañas de marketing, iniciativas de cross-selling con otros comercios, etc.
En BBVA Data & Analytics están analizando los datos, para ayudar a entender el impacto económico de eventos o en la toma de decisiones comerciales de instituciones y negocios. “El estudio de los datos permite poner a disposición de administraciones públicas, empresas privadas y en definitiva de los clientes una información que les ayudará en la toma de decisiones presentes y futuras. De esta manera se produce una democratización de capacidades y conocimiento hasta ahora solo al alcance de unos pocos”, explica Elena Alfaro, CEO de BBVA Data & Analytics.
Así se han llevado a cabo estudios con el Ayuntamiento de Madrid, analizando el turismo y sus comportamientos y gastos; en Barcelona, durante el Mobile World Congress y con el Estudio del turismo en España publicado el pasado mes de agosto.
Estos son sólo algunos ejemplos de lo que puede ofrecer el big data. La clave reside en poder extraer conocimiento de todos los datos que se producen. En el caso de BBVA, el área de Data & Analytics centraliza el conocimiento en ciencia de datos y analítica avanzada para convertir todos esos datos en mejores servicios y productos para los clientes, y en general para la sociedad.