Gira dos veces la llave de tu defensa digital
El 56% de los ciberataques ligados al robo de información se producen por tener contraseñas poco seguras. En el mundo digital actual las contraseñas son una palanca prioritaria para proteger nuestra información personal y profesional. Pero ¿cómo podemos asegurar que nuestras contraseñas sean lo suficientemente seguras? El equipo de seguridad de BBVA ofrece algunas claves sobre cómo prevenir accesos no autorizados y garantizar así la seguridad de nuestra información digital.
A la hora de crear una contraseña es fácil cometer algunos errores que al final acaban pasando factura: la repetición de la misma en varios servicios digitales, la asociación de elementos arraigados en nuestro día a día como fechas de cumpleaños o el nombre de nuestra mascota y/o la falta de complejidad debido a que, por lo general, buscamos memorizar patrones lo más sencillos posibles por falta de tiempo o inmediatez.
Las prisas, casi nunca, son buenas y eso es algo de lo que se aprovechan los ciberdelincuentes. No en vano, las contraseñas son la principal causa de los ciberataques que conducen al robo de datos. Así lo indica un informe elaborado por Sophos, que refleja que un 56 % de los ciberataques ligados al robo de información se producen, precisamente, por unas credenciales poco o nada robustas.
Todos contamos con información valiosa que conservar y proteger, no es necesario ser una gran corporación para ser objeto de los ciberdelincuentes. Como tampoco hace falta complicarse, en exceso, para proteger nuestra privacidad. Dar un doble giro de muñeca a nuestra llave digital es más sencillo de lo que parece.
Estos son algunos consejos para cerrar el paso a los ciberdelincuentes:
- Activar siempre el doble factor de autenticación (2FA) o la biometría (huella o rostro). Los códigos de validación son únicos e intransferibles.
- Aprovechar siempre que sea posible la longitud, para crear nuestras contraseñas. Crear contraseñas largas para que sean seguras. Para ello, puedes concatenar varias palabras fáciles de recordar (DaleatucuerpoalegríaMacarena) o usar la primera letra de cada palabra añadiendo algún número o carácter especial, al final (DatcaM26).
- Las contraseñas son secretas: hay que evitar compartirlas o escribirlas, y extremar la precaución si te solicitan tus credenciales por correo, SMS o llamada.
- Evitar el uso de credenciales de trabajo en cuentas personales (Netflix, Spotify, etc.).