En medio de la desaceleración económica, China prepara una moneda digital soberana
China sigue enfrentando un proceso de desaceleración de su economía, que se ha visto agravado por la guerra comercial con Estados Unidos. En agosto, la producción industrial mostró un menor dinamismo, con un crecimiento de 4,4% interanual, frente a 4,8% de julio, y tanto la inversión como las ventas han disminuido su crecimiento. En medio de este panorama, el Gobierno chino prepara su propia criptomoneda, con lo cual se convertiría en la primera potencia económica en emitir una moneda digital soberana.
En efecto, de acuerdo con un reciente informe de BBVA Research, varios indicadores de agosto confirmaron una desaceleración significativa de las actividades económicas y el aumento de la incertidumbre por la guerra comercial con Estados Unidos disminuyeron la confianza de los consumidores y obstaculizaron la expansión de la economía.
En el documento 'China: Desaceleración del crecimiento confirmada en agosto', el centro de estudios de BBVA anticipa que el Gobierno chino implementará más medidas de relajación monetaria y fiscal para impulsar el crecimiento. No obstante, señala que el riesgo de mayor desaceleración en la segunda parte de 2019 se mantiene alto y dependerá de la evolución y persistencia del conflicto comercial con el país norteamericano.
Moneda digital a la vista
En medio de la desaceleración de la economía, el Banco Popular de China (PBoC por su siglas en inglés) está próximo a lanzar la Moneda Digital del Banco Central (CBDC por sus siglas en inglés) respaldada por el Estado a través de las reservas fiduciarias, con lo que se convertiría en la primera potencia económica en emitir dinero digital soberano. En principio, está previsto su lanzamiento para el próximo 11 de noviembre, en el día de mayores compras, el 'Singles Day' o día del soltero.
Para poner en circulación la criptomoneda china, el PBoC se apoyará en siete instituciones: el Banco Industrial y Comercial de China, y el Banco de China, que son las dos entidades bancarias más grandes del mundo, así como en el Banco Agrícola de China. También contará con Alibaba y Tencent, que son dos de las empresas de tecnología más grandes del país asiático, y con Unión Pay, que es la asociación de bancos de ese país. Estas entidades pagarán al banco central el 100% de la emisión y luego las trasladarán a la población. El resto de bancos comerciales también tendrían la responsabilidad de distribuir los CBDC al público en general y a las empresas.
Igualmente, se contempla el uso de esta moneda digital a nivel internacional a través de bancos corresponsales. De acuerdo con el informe 'First Look: China's Central Bank Digital Currency', de Binance Research, el CBDC permitiría una mayor velocidad y menores costos para el pago transfronterizo, promoviendo en última instancia la internacionalización del renminbi (RMB).
La moneda digital china tiene como objetivo reemplazar el suministro del dinero en circulación, a través de la digitalización de efectivo y sus características principales están relacionadas con el anonimato y el cifrado, y además no requerirá de una cuenta bancaria para su uso.
Una política monetaria más efectiva
Según Binance Research, a través de la digitalización de su moneda, "el PBoC tiene como objetivo mejorar la efectividad de su política monetaria, al tiempo que traza una imagen más completa de todas las personas y empresas en China. Además, otro propósito clave es aumentar tanto la tasa de rotación del RMB como su alcance global (internacionalización)". Sin embargo, señala que se mantienen las preocupaciones de posibles riesgos y abusos de la privacidad financiera individual.
El informe también señala que los CBDC de China no competirían con los depósitos bancarios comerciales y que, por lo tanto, no tendrían un impacto notable en la economía. Esta moneda se almacenaría en billeteras digitales en forma de libros verificados por criptografía y algoritmos de consenso. Contiene una identificación de usuario y la información del propietario, y cada vez que se realiza una transacción se generará una nueva cadena CBDC que incluye la identidad del nuevo propietario.
Lo que la diferencia del 'bitcoin', es que la criptomoneda china estará centralizada y será el banco central chino el que la administrará y decidirá la cantidad que suministra. Además, tendrá una mayor capacidad de vigilar a los usuarios.
Al respecto, Binance Research señala que en comparación con las criptomonedas descentralizadas, una altamente centralizada podría afectar negativamente la privacidad financiera de todas las personas. Además, se pregunta si un tercero podría congelar activos y en qué circunstancias específicas. Igual plantea que como uno de los objetivos es internacionalizar el renminbi queda pendiente conocer la legislación que se aplicará a los pagos transfronterizos y si las personas fuera de China dependerán del banco central chino para proteger su privacidad financiera.
Hay varios países que ya están adelantando su proceso para tener una criptomoneda con apoyo estatal. Pero ha sido Venezuela el primero en tenerla, pues lanzó el 'petro' en 2018. En Latinoamérica, también Uruguay emitió billetes digitales mediante un programa piloto y Perú y Brasil han manifestado su intensión de trabajar en el tema. Países como Suecia y Suiza ya tienen bastante desarrollado el proceso y algunos lo están explorando como India, Rusia, Israel, Irán, entre otros.