Emprendimiento y tecnología, el binomio para derribar las barreras de la discapacidad
Una de cada seis personas en el mundo sufre algún tipo de discapacidad, según la Organización Mundial de la Salud. Ofrecerles servicios más accesibles, desarrollar tecnología que mejore su día a día y fomentar su inclusión laboral es el objetivo de numerosos emprendedores. En el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra el 3 de diciembre, se pone de manifiesto la importancia de la tecnología y el emprendimiento para atender las necesidades de los diferentes tipos de discapacidad.
"La innovación da una oportunidad a las personas con discapacidad que podrían no haber tenido de otra manera". Son las palabras de Guillermo Gauna Vivas, fundador de Ayúdame3D, una plataforma de expertos en impresión 3D que fabrican trésdesis, protésis de brazos que permiten adquirir movilidad prensil gracias a sus articulaciones (hombro, codo o muñeca). La idea nació a partir de la experiencia previa de Gauna Vivas en impresión 3D y la realización de un voluntariado en Kenia, donde vio la necesidad de mejorar la vida de personas que necesitaban una prótesis.
Ayúdame3D es una respuesta a un gran desafío: promover la inclusión de las personas con discapacidad a través de soluciones tecnológicas innovadoras. De acuerdo con las cifras del Banco Mundial, una de cada seis personas en el mundo sufre algún tipo de discapacidad. En América Latina la cifra se sitúa en los 85 millones, según los últimos datos registrados por la misma entidad, mientras que en Europa el dato es ligeramente superior: 87 millones, de acuerdo con cifras de la Comisión Europea.
La Unión Europea se alza como la región más involucrada en resolver las necesidades de las personas con discapacidad, seguida por América Latina y América del Norte, tal y como destaca el 'Mapa del Emprendimiento 2023' elaborado por South Summit. El Día Internacional de las Personas con Discapacidad que se celebra el 3 de diciembre, pone de manifiesto la importancia de iniciativas que, gracias a la tecnología y la innovación, ayudan a derribar barreras.
Innovación al servicio de la accesibilidad
El 'Mapa del Emprendimiento de South Summit' resalta que las startups dedicadas a ofrecer soluciones para personas con discapacidad apuestan por tecnologías de aumento, es decir soluciones que aumentan sus capacidades y abarcan desde prótesis, hasta exoesqueletos o interfaces cerebro-ordenador. Estas innovaciones se enmarcan en tres esferas: motora —como la propuesta de Ayúdame3D—, sensorial y cognitiva.
En el ámbito de la accesibilidad sensorial se encuentra la propuesta de la startup española Visualfy, que ha desarrollado un algoritmo de inteligencia artificial capaz de reconocer sonidos como el timbre de una puerta o una alarma antiincendios y traducirlos en señales visuales para ayudar a personas con pérdida auditiva. Recientemente, Renfe anunció la inversión de un millón de euros en esta compañía para implementar un sistema de información para personas sordas en sus estaciones.
"No sabemos cuándo se va a producir un sonido, de dónde va a proceder o si hay otro sonido que se vaya a solapar de tal modo que, discernirlos para actuar en consecuencia, es realmente complejo", señala el cofundador de la compañía, Manel Alcaide, quien precisa: "Nuestra oferta no es tecnológica, sino accesible. La tecnología simplemente es el vehículo para alcanzar la accesibilidad".
En el ámbito de las tecnologías de aumento cognitivo también se pueden encontrar iniciativas. Es el caso de la española Broomx Technologies que crea experiencias inmersivas para ayudar a los pacientes a mejorar su bienestar mental. Este año, ha arrancado un proyecto junto al Institut d’Assistència Sanitària de Girona, el IDIBGI y la Fundació Granés para estudiar la eficacia de la realidad virtual en el tratamiento de personas con autismo. También la reciente creada Alianza Tecnológica por la Inclusión, una unión entre distintas entidades y empresas tecnológicas con el fin de "superar la brecha digital de las personas con dificultades de comprensión".
Promoviendo el acceso al mercado laboral
Además de los desafíos particulares de su día a día, las personas con discapacidad se enfrentan al reto general de acceder al mercado laboral, un reto en el que poco a poco se dan pasos hacia delante. En España, por ejemplo, la contratación de las personas con discapacidad creció en un 2,3% en 2022.
A esta realidad tratan también de dar respuesta iniciativas emprendedoras como la startup argentina Incluyeme.com, una plataforma que trabaja para promover la inclusión sociolaboral de las personas con algún tipo de discapacidad o la española Specialisterne, centrada en la inclusión de personas con autismo o síndrome de Asperger en entornos tecnológicos y con la que colabora BBVA.
La inclusión también cristaliza a través de emprendimientos desarrollados por personas con discapacidad como el de la marca de zapatillas española, Timpers, cofundada por Diego Soliveres (con discapacidad visual), Roberto Mohedano (discapacidad física) y Aitor Carratal (discapacidad orgánica). Esta compañía diseña zapatillas para personas invidentes: las texturas y los materiales están orientados al tacto y los modelos incluyen el logo en Braille. Además, su plantilla está formada por personas con discapacidad. “Importan más nuestras capacidades que nuestras discapacidades”, afirma su web. Otro ejemplo es la startup Wheel The World, una plataforma que promueve el turismo accesible, cofundada por el chileno Álvaro Silberstein, con discapacidad física.
Para impulsar el desarrollo de este tipo de proyectos, en España existen diversas ayudas y subvenciones que permiten alcanzar la inclusión laboral, como Por Talento de la Fundación ONCE.
Emprender desde la concienciación
Al margen de las iniciativas que promueven la inclusión laboral de las personas con discapacidad o las orientadas a hacer más fácil su día a día, también es necesario que la sensibilización llegue a las empresas de forma generalizada.
Aunque las empresas cada vez están más comprometidas, es necesario seguir dando pasos para alcanzar la inclusión, tal y como señala Carmen Millán, directora del Centro de Tiflotecnología e Innovación (CTI) de la ONCE. "Si nos comparamos con hace diez años hemos evolucionado mucho, pero todavía quedan muchas organizaciones que tienen un gran desconocimiento en materia de accesibilidad y cuando contactan con nosotros se les abre un mundo nuevo". Tras ese primer acercamiento, el CTI colabora con las compañías para que avancen en materia de accesibilidad. "A partir de ahí intentamos, sobre todo, concienciar, dar una hoja de ruta y ofrecerles guías para que puedan hacer sus soluciones accesibles", asegura.
Como ejemplo de esta labor, el CTI cuenta con una cátedra con la Universidad Complutense de Madrid para sensibilizar a los profesionales de las diferentes áreas del conocimiento para que tengan en cuenta la importancia de la accesibilidad cuando se incorporen al mercado laboral. "Es imprescindible participar en este tipo de espacios o estar en eventos, para escuchar, influir y entender que las personas con discapacidad también son consumidoras de cualquier producto y que no se puede dejarlas atrás", destaca Millán.
Este mismo propósito coincide con la mirada emprendedora de Guillermo Gauna Vivas, de Ayúdame3D. "Para qué emprender si no es con propósito social; para qué emprender si no es para resolver un problema que existe en el mundo. Si tenemos los recursos, la innovación y la tecnología, podemos hacerlo", afirma. Poco a poco, la sociedad se encamina hacia entornos cada vez más más inclusivos con el objetivo de que las personas con discapacidad, gracias a la tecnología y al emprendimiento, puedan disfrutar de una vida plena y sin barreras.