Cinco claves para que nadie nos robe la tranquilidad estas vacaciones
Nuestra vida o gran parte de ella, está en nuestros dispositivos móviles. No hay nada más angustioso que creer que lo hemos perdido o nos lo han robado. Además del valor económico del dispositivo, que puede ser elevado, los delincuentes están poniendo el foco en la información que pueden obtener de él. Presta atención a esta tendencia, te facilitamos algunas claves para estar mejor protegido.
El robo de móviles ha experimentado un aumento significativo a nivel global. Según el informe Tendencias de fraude bancario digital en 2024 en EMEA (Europa, Oriente Medio y África) de BioCatch, los casos de dispositivos robados que se informan, aumentaron un 43% en la región; el Reino Unido, España y Portugal son los principales responsables de este aumento.
Por desgracia, el robo de móviles no sólo supone la pérdida del dispositivo, que puede tener un valor económico elevado. Cada vez más, los delincuentes están poniendo el foco en el valor que el teléfono móvil representa y contiene: información personal, acceso a información sensible, contactos y todo el universo de las finanzas personales un único dispositivo.
Todo pasa en los móviles: llamamos o nos escribimos mensajes con nuestros amigos y familiares; consultamos información; utilizamos navegadores o app de transporte; realizamos trámites administrativos; gestionamos el calendario y el correo electrónico; realizamos compras, transferencias, pagos, etc. Además de utilizarlo para numerosas actividades de nuestro tiempo libre como hacer deporte, ver videos, escuchar música, hacer fotos, jugar a videojuegos, leer libros electrónicos, acceder a redes sociales…Por eso no es de extrañar que el 75% de los casos de fraude ocurre en dispositivos móviles entre los clientes europeos de BioCatch, un 6% más desde 2022.
¿Cómo es el modus operandi? Acechar y esperar a la oportunidad
Los criminales siguen poniendo de manifiesto que conocen en detalle a las personas y cómo nos comportamos. Mientras vamos en transporte público, cuando estamos en una terraza o en un concierto… en cualquier lugar y momento podemos necesitar nuestro móvil.
Concretamente se da una combinación de “costumbres” que llevamos a cabo sin darnos cuenta del riesgo que suponen.
¿Qué podemos hacer para incrementar la protección de nuestros dispositivos?
Hay una serie de criterios básicos para proteger nuestros dispositivos y toda nuestra información. En primer lugar, evitemos que en caso de robo alguien pueda acceder a nuestro móvil con unos consejos muy sencillos:
- Bloqueo de pantalla activo: usar siempre métodos de bloqueo de pantalla, a ser posible mediante huella o firma. En caso de usar patrón, evitar patrones de bloqueo débiles U, M, Z...
- Establece tiempos de inactividad de pantalla cortos: de 5 o 10 segundos máximo
- Para evitar el ‘shoulder surfing’ (técnica que consiste en observar sobre el hombro de la víctima la información que se introduce en los teléfonos, ordenadores o cajeros automáticos u otros dispositivos) activar el modo discreto, cuando exista la opción como en el caso de la app de BBVA
- ¿Problemas para recordar contraseñas? Activar el acceso y la firma biométrica y nunca almacenar contraseñas en el llavero de chrome, información personal en las notas, etc…
- Activa el método para localizar y encontrar un móvil robado o perdido, tanto si es un dispositivo Android (“Encontrar mi dispositivo”) como si se trata de un iPhone (“Buscar mi iPhone” ). Cada uno de los sistemas operativos tiene su propio método para detectar la ubicación exacta del dispositivo y podrás hacerlo desde la configuración de seguridad del dispositivo. Y más adelante veremos que esto es clave.
¿Y qué sucede si nos lo roban?
La probabilidad de que un robo de teléfono resulte en la pérdida de control de sus cuentas está determinada por la velocidad con la que reacciona ante el robo del dispositivo. Es mejor asumir que el teléfono no será recuperado y concentrar los esfuerzos inmediatos en limitar el daño que esto pueda causar.
La primera hora es la hora “dorada”
A continuación se describen los pasos inmediatos que se deben tomar dentro de la primera hora después del robo y cómo mitigar el daño causado dentro de las siguientes 24 horas.
- El objetivo crucial inmediatamente después del robo del teléfono es bloquear el dispositivo para mantener sus datos seguros. Garantizar que esto se haga con prontitud reducirá la probabilidad de que el ladrón obtenga acceso a la información o comprometa las cuentas en línea y limitará la capacidad de causar más daños.
- Denunciar el robo, es una gestión rápida que se puede hacer en cualquier comisaría. Para ello necesitarás el IMEI. Obviamente si no dispones del dispositivo no lo vas a tener. Pero lo puedes consultar previamente. La forma más sencilla de consultar el IMEI es marcar en tu teléfono la combinación *#06# para que aparezca la información. Apunta el código.
- Bloquear o borrar el dispositivo robado. Los dispositivos Android e iOS tienen capacidades no solo para encontrar el dispositivo sino también para su bloqueo remoto en caso de pérdida o robo del dispositivo.
- Cancela tu tarjeta SIM robada. Después de proteger el dispositivo, el siguiente paso debería ser proteger el número de teléfono. Contactar con el proveedor de red e informarle de la situación para iniciar el proceso de recuperación de la tarjeta SIM. ¿Por qué es tan importante este paso? Bloquear la SIM robada y transferir el número a una nueva SIM evitará que el ladrón reciba los mensajes de texto que las apps envían para llevar a cabo determinadas acciones, lo que se denomina confirmación multifactor o doble factor de autenticación, que puede realizarse por SMS, entre otras formas.
- Contacta con las entidades bancarias para cancelar los medios de pago y modificar los accesos online. En BBVA contarás con la ayuda de profesionales que te acompañarán durante todo el proceso. Cualquier robo es de por sí una situación muy perniciosa a nivel personal, pero precauciones de naturaleza preventivas como estas reduce el riesgo de pérdida más allá del dispositivo.
Estar al tanto de las últimas tendencias en materia de ciberseguridad y conocer los pasos a seguir en caso de emergencia, nos ayuda a reaccionar rápida y adecuadamente para proteger al máximo nuestros dispositivos y toda la información que en ellos se encuentra. Recuerda: la primera defensa eres tú.