“BBVA ha creado algo único dando impulso a ‘startups’ como Azlo”
La ‘startup’ Azlo, nacida en el área de New Digital Businesses de BBVA, tiene un claro objetivo: ayudar a la nueva generación de emprendedores a explotar todo su potencial con herramientas financieras digitales para crecer económicamente. Y el momento no podía ser más preciso, con el auge de la ‘gig economy’.
Brian Hamilton, CEO y fundador de Azlo, habla de las razones que les llevaron a iniciar esta aventura empresarial de la mano de BBVA, así como de sus objetivos y de las necesidades financieras del colectivo al que se dirige la ‘startup’: los emprendedores, autónomos y pequeños comercios, un segmento económico al que el sector financiero tradicional no ha dado una respuesta satisfactoria.
¿Qué es Azlo?
Azlo es una plataforma de banca sin comisiones para trabajadores autónomos, emprendedores y pequeñas empresas. Nuestras cuentas operan de forma completamente ‘online’ y disponen de muchos de los servicios que cabría esperar de una cuenta bancaria comercial al uso, como una tarjeta de débito, acceso a cajeros automáticos, ingreso de cheques por móvil, pagos de facturas y transferencias ACH. A diferencia de otros bancos, no cobramos comisiones.
También ofrecemos facturación digital dentro de la ‘app’, lo que significa que se pueden enviar facturas a los clientes muy rápido, directamente desde la cuenta del banco. También proporcionamos la capacidad de conectar directamente con servicios de aceptación de pago muy populares, como Stripe y Square y otros que estarán disponibles en breve.
Además estamos desarrollando otras muchas funciones, como la integración de herramientas de contabilidad, pagos internacionales y un portal de APIs desde donde se podrá acceder a los datos de la cuenta directamente sin utilizar nuestras aplicaciones.
Brian Hamilton, CEO de Azlo.
¿Qué es lo que hace a Azlo una ‘startup’ única?
Lo primero y principal, Azlo no cobra comisiones como hacen otros bancos. Esto es algo fundamental en nuestra visión de ofrecer a la nueva generación de emprendedores acceso a las ventajas del sistema bancario.
En segundo lugar, todo el proceso de alta de nuevos clientes se hace por internet. Ningún otro banco de EE.UU. (donde tenemos nuestra sede) puede ofrecer actualmente este servicio. Esto quiere decir que podemos abrir una cuenta y gestionar todas las operaciones bancarias desde un ordenador o desde el teléfono.
¿Por qué crearon el negocio?
Hay una oportunidad considerable, en particular en EE. UU., para mejorar la experiencia diaria de los emprendedores, fundadores, propietarios de pequeñas empresas, comerciantes individuales y trabajadores autónomos, proporcionándoles productos de servicios financieros bien adaptados a sus necesidades. Los bancos y las instituciones de servicios financieros tradicionales no están abordando este mercado correctamente, ya que se esfuerzan por equiparar su flujo de caja “empresarial” con su cuenta “personal”, cuando de hecho son una misma cosa. Y sabemos que este problema no es exclusivo de EE. UU., sino que es un problema global.
"Los fundadores pueden ser creativos y disruptivos y dirigir su empresa como una entidad independiente, pero teniendo a la vez una red de apoyo adicional"
Para estas personas parece ser que la creación de una empresa es demasiado compleja...
La experiencia de crear una empresa no está particularmente avanzada en el ámbito digital y menos aún el proceso de abrir una cuenta bancaria comercial. Ahora mismo hay una gran demanda de servicios que atiendan mejor a los emprendedores, propietarios de pequeñas empresas y trabajadores autónomos, pues cada vez hay más personas que se están estableciendo por su cuenta. También hay una gran demanda de productos para apoyar al creciente número de personas que trabajan por cuenta propia o en la llamada ‘gig economy’.
¿Por qué han decidido asociarse con BBVA?
BBVA es una organización única, como lo es el ecosistema de ‘startups’ que ha creado. Su presidente, Francisco González, y el consejero delegado, Carlos Torres Vila, son verdaderos visionarios: han invertido en algunos de los aspectos más disruptivos del mercado y han establecido una agenda para el desarrollo de los servicios financieros del futuro.
Tratar de empezar un negocio en torno a los servicios bancarios básicos es sumamente difícil. He trabajado en proyectos de intraemprendimiento y en el mercado tradicional de capital riesgo en el pasado y por mi experiencia sé que siempre se necesita más dinero y más tiempo de lo que se había previsto para crear un producto básico.
Lo que ha hecho BBVA es crear algo único, dando impulso a ‘startups’ como Azlo para crecer al proporcionarle acceso a herramientas, financiación y conocimientos especializados. De esta forma, los fundadores pueden ser creativos y disruptivos y dirigir su empresa como una entidad independiente, pero teniendo a la vez una red de apoyo adicional.
La prueba del impacto de BBVA está en las personas que se han sumado a su visión y se han convertido en parte de su ecosistema. Y para nosotros, está empezando a dar frutos: Azlo va viento en popa.