Aprender a emprender: seis pasos para el éxito en el emprendimiento
Identificar las oportunidades de negocio, entender cómo se debe planificar un proyecto, mejorar las redes de contacto: son muchos los aspectos se deben tener en cuenta antes de iniciar un proyecto empresarial y que pueden frenar la carrera del emprendimiento. Aprender a emprender puede ayudar a los emprendedores a superar los obstáculos y dar forma a sus proyectos.
El tejido emprendedor de España sigue creciendo. Según los datos del último informe publicado por South Summit, España suma ya más de 12.000 startups y se sitúa como el cuarto país europeo por número de startups, solo por detrás de Reino Unido, Francia y Alemania.
Los datos del 'Informe GEM España 2021-2022', el último disponible, apuntan a que en 2021 la tasa de actividad emprendedora del país alcanzó un 5,5%, un porcentaje cercano a los niveles previos a la pandemia.
A nivel global, el 'Global Entrepreneurship Monitor 2022-2023' señala que países de la región de América Latina y el Caribe como Colombia, Guatemala, Panamá o Chile registraron las mayores tasas de actividad emprendedora, seguidos por Emiratos Árabes Unidos y Togo.
A pesar de estas cifras, el miedo a emprender aún sigue existiendo. El temor al fracaso sigue frenando la actividad emprendedora en muchos países, incluso cuando se cree que hay buenas oportunidades para hacerlo. Aprender a emprender, en este sentido, puede ayudar a los emprendedores a dar forma a sus ideas y superar este obstáculo.
Los seis pasos para aprender a emprender
El emprendedor es una de las principales figuras detrás del éxito de una startup. Aunque hay factores externos que pueden alterar el rumbo de una nueva empresa, los conocimientos y cualidades de los emprendedores juegan un papel fundamental en la trayectoria de estos proyectos.
El imperio cosmético Mary Kay, por ejemplo, no se entendería sin su fundadora, Mary Kay Ash. De la misma forma, Amazon no se entendería sin Jeff Bezos: los dos son necesarios para entender el éxito de sus empresas, al igual que el resto de grandes emprendedores detrás de un proyecto de éxito.
En estos emprendedores de éxito se pueden identificar algunas fortalezas comunes. Algunas son intrínsecas al propio individuo, pero otras deben desarrollarse con tiempo y trabajo. Se puede aprender a emprender, al igual que ocurre con otros aspectos de la vida. De hecho este aprendizaje es fundamental para poder alcanzar el éxito.
Ampliar conocimientos
Tener una buena educación financiera ayuda a los emprendedores a identificar oportunidades de negocio, tomar mejores decisiones y reducir riesgos y errores. Al comprender conceptos básicos como 'retorno de la inversión' y entender cómo se realiza un análisis de mercado o un plan de negocio, los emprendedores pueden visualizar mejor la situación en la que se encuentra su empresa o proyecto y negociar con mayor facilidad con los socios e inversores.
A pesar de que tener conocimientos financieros resulta de gran ayuda a la hora de emprender, la educación financiera sigue siendo una asignatura pendiente para buena parte de la población. En el caso de España, por ejemplo, una encuesta elaborada por la EFPA España sitúa la nota media de la población en un 4,33 sobre diez, y aunque la mitad de los profesionales aprueban en este ámbito, solo un 11% puntúa con una nota superior al siete.
Para aumentar su nivel educativo, los emprendedores pueden recurrir a cursos físicos u ‘online’ de las escuelas y universidades o al paquete educativo que algunas empresas ponen a su disposición. En el caso de BBVA, por ejemplo, el banco ofrece acceso gratuito a herramientas y contenidos relacionados con esta materia a través de la sección 'Para tu Negocio', de BBVA España, o de la 'Plataforma de Educación Financiera' de BBVA en Argentina.
Entrenar las 'soft-skills'
Además de los conocimientos financieros, en el emprendimiento también intervienen otras habilidades conocidas como 'soft-skills' (habilidades o competencias blandas, en su traducción al español).
Este término hace referencia a las aptitudes sociales que posee una persona y que le pueden ayudar en su carrera profesional, como su creatividad, su capacidad para resolver problemas, su resiliencia o su manera de comunicar.
Comunicar de manera efectiva, saber resolver problemas, liderar equipos y controlar el estrés son algunas de las 'soft-skills' básicas más importantes de cara a emprender.
Compartir las ideas
Todo emprendimiento comienza con una idea, pero no todas las ideas son buenas. Incluso cuando se tiene experiencia y conocimientos financieros se pueden cometer errores. Aceptar esta posibilidad es imprescindible para poder aprender y mejorar como emprendedor.
Estar abierto a las críticas y comentarios de otras personas ayuda a identificar los fallos de un proyecto y a buscar puntos de mejora. Al compartir las ideas que se tienen, se puede encontrar nuevas perspectivas de negocio y conocer la aceptación que el proyecto tendría entre el público. Por mucho que un emprendedor confíe en su idea, esta no tiene por qué encajar con los intereses de los clientes. Por eso, es recomendable que los emprendedores acepten las críticas y hablen de sus ideas, especialmente con los expertos su sector.
'Networking': cómo aumentar los contactos
Un proyecto se nutre de trabajadores, socios e inversores. Aunque la idea de proyecto nazca de un emprendedor, para dar forma a la empresa es necesario contar con el apoyo de terceros, por lo que es recomendable contar con una buena red de contactos a la que poder acudir.
Los eventos de ‘networking’, en este caso, pueden ayudar a los emprendedores a mejorar sus redes y conocer a otros expertos con los que crear sinergias y firmar acuerdos, especialmente cuando se está empezando en el mundo de los negocios. Plataformas como LinkedIn, donde los emprendedores pueden crear tanto su perfil personal como el perfil oficial de su empresa, también pueden ser de utilidad de cara a ampliar contactos.
Planificar el proyecto
Para poder lanzar una nueva startup al mercado no basta con tener contactos e ideas: también hay que definir cómo se estructurará la empresa. En este proceso, los emprendedores deben seguir una serie de pasos que les ayudarán a dar forma a su proyecto. Algunos de los más importantes son:
- Estudiar el mercado. Los emprendedores deben conocer las tendencias del sector en el que quieren emprender y la competencia a la que tendrán que enfrentarse.
- Redactar el plan de negocio. Se trata de un documento que define los principales aspectos del proyecto, como el modelo de negocio, la estructura de costes o el plan de marketing y comunicación. Su correcta elaboración es vital para atraer inversores y conseguir financiación.
Descubre la guía de BBVA sobre como emprender un negocio
Conseguir financiación
Todo proyecto necesita fondos económicos para salir adelante. Los 'business angels', los fondos de capital riesgo o incluso las subvenciones públicas pueden ayudar a los emprendedores a conseguir los recursos que necesitan.
No rendirse
La carrera del emprendimiento es larga y a menudo está llena de obstáculos. De media, se calcula que las startups necesitan entre tres y cuatro años para ser rentables y que solo un 40% logran conseguir estos beneficios, según un estudio elaborado por Zippia.
Para poder alcanzar el éxito como emprendedor, es importante mantener la constancia y la perseverancia y no rendirse ante los fallos y adversidades. Incluso emprendedores de éxito como Bill Gates o Jeff Bezos han hecho frente a errores y fracasos. Aceptar este riesgo resulta imprescindible para evolucionar como emprendedor.
Los emprendedores no nacen, se construyen. Mejorar sus conocimientos y habilidades, ampliar sus redes de contacto y mantener la constancia y perseverancia resulta vital para alcanzar el éxito. Aprender a emprender es posible.