2025, el año para promover la computación cuántica
BBVA es el único banco español que se ha sumado a los más de 300 grandes expertos y organismos que piden que la UNESCO proclame 2025 como Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuánticas. Se espera que, a lo largo de este siglo, esta tecnología ayudará a dar un salto de gigante en la ciencia del clima y el desarrollo de nuevos materiales, tratamientos médicos y energía no contaminante, entre otras aplicaciones. Los impulsores del Año Cuántico confían en que la iniciativa ayudará a promover las vocaciones de los profesionales que harán realidad estos avances en las próximas décadas.
Más de 300 empresas, instituciones y expertos de todo el mundo han firmado una carta abierta dirigida a la UNESCO para apoyar la proclamación de 2025 como el Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuánticas, a la que BBVA se ha unido como único banco español. La iniciativa, que apoya una petición de las principales academias científicas internacionales, contribuirá a impulsar grandes avances en áreas críticas relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, como el desarrollo de energía no contaminante, la acción por el clima o el impulso de un crecimiento económico sostenible, entre otros.
Para formalizar la firma ceremonial del documento, los firmantes han celebrado una Quantum Key Stakeholder Assembly (Asamblea de Actores Clave en Computación Cuántica) en el marco de Puzzle X, un evento que se reúne cada año en Barcelona para debatir cómo las tecnologías exponenciales —entre las que también se encuentran la inteligencia artificial, la nanotecnología o la biología sintética— pueden ayudar a transformar el mundo.
A lo largo del siglo XX, la ciencia y la tecnología cuánticas han estado detrás de avances tan transformadores como la creación de los transistores y los láseres que sustentan la actual electrónica y las telecomunicaciones globales, respectivamente. En las próximas décadas, se prevé que sus aplicaciones sean decisivas para transformar el modelado de sistemas complejos —y así mejorar desde la previsión de fenómenos meteorológicos extremos hasta la evaluación de riesgos financieros—, el despliegue de comunicaciones ultraseguras y el desarrollo de tratamientos médicos, nuevos materiales y baterías de energía más eficientes y sostenibles.
Como afirma la carta abierta a la que se ha adherido BBVA, para poder acelerar estos futuros avances tecnológicos es necesario fomentar las vocaciones profesionales que los hagan posibles, lo que pasa por aumentar la visibilización de la disciplina. “La proclamación de 2025 como Año Cuántico, cuando se cumplen 100 años del inicio de la mecánica cuántica moderna, la pondrá bajo el foco mediático y contribuirá a aumentar la concienciación en torno a su potencial”, afirma Escolástico Sánchez, líder de la disciplina Quantum en BBVA.
En su charla en Puzzle X, Escolástico Sánchez ha compartido tres casos de uso en los que BBVA está trabajando para resolver retos financieros con computación cuántica: ajustes de valoraciones por riesgo de crédito en ciertos derivados que requieren millones de simulaciones, en colaboración con la startup Zapata Computing; gestión del efectivo en los cajeros automáticos para prestar el mejor servicio a los clientes, en colaboración con el CSIC; y optimización de una cartera de inversiones a lo largo del tiempo en colaboración con la startup Multiverse Computing.
Además de estos proyectos, BBVA colabora con otras empresas españolas para explorar el potencial cuántico en el proyecto CUCO, subvencionado en parte por el CDTI, para profundizar en los retos energéticos, aeroespaciales, financieros, logísticos y de defensa que pueden resolver estas tecnologías.