Las 10 principales tendencias tecnológicas para 2018
Vivir ajeno al progreso tecnológico y a sus tendencias supone un paso atrás importante en cualquier empresa. "La tecnología estará integrada en todo negocio digital del futuro". Así se afirma en el último informe de Gartner con las 10 tendencias principales que tendrán más impacto en 2018 y que, según la consultora, marcarán el rumbo de los próximos 10 años.
Lo que las une es que todas forman parte de lo que Gartner ha denominado la malla digital e inteligente ('intelligent digital mesh'), un engranaje de dispositivos, personas y servicios interconectados sobre el que se apoyarán los modelos de negocio del futuro. Estos modelos se basarán en su mayoría en técnicas de inteligencia artificial, serán digitales y operarán en red.
Partiendo de estos tres ejes, Gartner ha identificado 10 tendencias específicas como la robótica autónoma, las crecientes aplicaciones del internet de las cosas y el desarrollo de servicios basados en 'blockchain'.
Inteligencia artificial como ‘cimiento’
La inteligencia artificial (IA) está tomando un papel más determinante en el día a día de las empresas y, según Gartner, de aquí a 2025 se convertirá en la herramienta “base” para redefinir la experiencia de cliente y reinventar una amplia variedad de modelos de negocio.
No obstante, Gartner hace una importante distinción entre dos tipos de IA: la general, comprendida como una entidad capaz de realizar cualquier tarea (que recomienda dejar para “los escritores de ciencia ficción”); y la “IA estrecha” o reducida, que es capaz de aprender a realizar tareas muy específicas, y hacerlas muy bien. Como por ejemplo, entender el lenguaje humano o conducir en un entorno controlado.
Esta última es la que, alimentada por algoritmos de ‘machine learning’ altamente especializados, promete mayores resultados para las empresas y por la que Gartner recomienda apostar en los próximos años.
Hace cuatro años BBVA creó BBVA Data & Analytics, un equipo de expertos que emplea el 'big data' en combinación con técnicas avanzadas de 'machine learning' tanto para la mejora de procesos internos específicos, como para la creación de nuevos servicios automatizados y productos más personalizados para los clientes. Un ejemplo de ello es BBVA Bconomy, una funcionalidad que emplea la inteligencia artificial para medir la salud financiera de los clientes en función de sus datos y ofrecerle medidas de ahorro personalizadas.
Aplicaciones y análisis inteligentes
El estudio también pone el foco en que prácticamente todas las aplicaciones y servicios contarán con alguna forma de IA. Esto dará lugar a aplicaciones inteligentes que actuarán como intermediarios inteligentes y no intrusivos en la relación entre personas y sistemas. Tendrán, además, la capacidad de transformar la forma de trabajar en el futuro, como en el caso de los asistentes virtuales de atención al cliente.
El informe expone la necesidad de "explorar aplicaciones inteligentes como una forma de aumentar la actividad humana y no simplemente como una camino para reemplazar a los empleados". Además, pone el foco en cómo las “analíticas aumentadas” a través de la IA constituyen un área de especial crecimiento y pueden suponer una revolución en la forma de recopilar datos e intercambiar ideas en una amplia variedad de negocios. Usarlas para agregar "valor empresarial" será el gran reto de las empresas, en opinión de David Cearley, vicepresidente de Gartner.
También en el sector financiero, la inclusión de funciones automáticas inteligentes permite tomar decisiones con la mejor la información disponible. Un buen ejemplo es el programa RedeX, desarrollado por BBVA Data & Analytics y premiado por la revista The Banker (perteneciente al grupo de Financial Times), que mejora el proceso de evaluación de riesgos en las solicitudes de crédito de clientes nuevos y actuales basándose en diferentes tipos de datos, como transferencias bancarias, boletines oficiales y operaciones con otras instituciones –y sin necesidad de solicitar información adicional.
Objetos inteligentes que hablan entre sí
Vehículos autónomos, robots o aviones no tripulados. Todo va a estar conectado y con la llegada de las redes 5G se alcanzará la cumbre del internet de las cosas. Esta tendencia de conectar dispositivos para que se comuniquen entre ellos supondrá una forma de interactuar de forma más natural con el entorno, cambiando el paradigma de la relación entre ser humano y máquina. Algo esencial para el desarrollo de negocios sostenibles.
La clave estará además en que a medida que esta tendencia prolifere, se creará una red colaborativa de objetivos inteligentes en los que múltiples dispositivos (coches, semáforos, carreteras, ‘smartphones’) trabajarán de forma conjunta, ya sea con o sin intervención humana.
Un 'gemelo digital' para crear valor
Los ‘gemelos digitales’ son las representaciones virtuales de cualquier entidad o sistema del mundo real. Son como el ‘reflejo’ digital de los objetos conectados al internet de las cosas, que contienen la información sobre su estado en el mundo real. Estos avatares digitales pueden responder a cambios en el entorno, mejorar procesos y añadir valor. Y dado el volumen de objetos conectados que habrá en el mundo de aquí a 2020 (unos 20.000 millones según Gartner), su correcta gestión podrá implicar el ahorro de miles de millones de dólares mediante la mejora de la eficiencia operacional y el mantenimiento de sistemas.
Los gemelos digitales permitirán el análisis de datos y la monitorización de todo tipo de sistemas para evitar problemas, prevenir tiempos de inactividad, desarrollar nuevas oportunidades e incluso planificar el futuro mediante simulaciones.
Un gemelo digital es un modelo virtual de un proceso, un producto o un servicio.
"Con el tiempo, las representaciones digitales de nuestro mundo estarán conectadas con una figura existente en el mundo real que ofrecerán capacidades basadas en IA para permitir simulaciones, operaciones y análisis avanzados de los procesos", puntualiza el experto.
La nube no está sola: llega el 'edge computing'
El 'edge computing’ es un modelo de computación en el que el procesamiento y la recopilación de información tiene lugar cerca de la fuente de los datos. Es decir, en vez de realizar el procesamiento en la nube, cada dispositivo conectado a la red desempeña su propio papel en el tratamiento de la información. Un enfoque que busca reducir la latencia (el tiempo requerido para el envío de datos) y la saturación de la red.
La tendencia hacia la adopción de ‘edge computing’ viene por el aumento del uso de los dispositivos móviles, especialmente el consumo de vídeo, realidad virtual y aumentada, así como el despliegue masivo de sensores como parte del IoT. Los analistas auguran una gran demanda en 2018, lo que aún no está claro es cómo debe ser la infraestructura para apoyarla.
Lo que sí apunta el informa es que el ‘cloud’ y el ‘edge computing’ serán complementarios. El ‘edge computing’ supone una nueva tipología que ubica los procesos de computación al “borde” de la red, de forma más próxima a los usuarios u objetos conectados. Mientras que la nube se destina a los servicios ofrecidos a través de internet.
Los 'chatbots' llegan al punto de inflexión
Supondrán el cambio más importante en la relación entre seres humanos y máquinas. ¿Es posible interactuar con una máquina tal y como se hace con otra persona? Aquí entran los asistentes de voz como Siri o Cortana con el objetivo para 2018 de que sean ellos quienes 'hablen' a los usuarios. Es decir, que sean capaces de entender y anticiparse.
"Las plataformas de conversación han alcanzado un punto de inflexión en cuanto a la comprensión del lenguaje y la intención básica del usuario, pero todavía queda trabajo", sugiere Cearley. Una tendencia que, según Gartner, se extenderá a otros usos, profesionales principalmente, para facilitar el inicio de las operaciones y transacciones sin la necesidad de obtener previamente la información.
El banco de BBVA en Turquía, Garanti, ha desarrollado MIA, (asistente móvil interactivo, por sus siglas en inglés), un 'chatbot' que utiliza el lenguaje natural para responder preguntas de los usuarios y realizar acciones como transferencias o comprar y vender moneda extranjera... todo mediante la voz. El asistente ha sido reconocido este año por Efma (European Financial Management Association), que ha premiado a MIA como una de las innovaciones más relevantes.
BBVA también está integrando sus servicios financieros en las principales redes sociales a través de asistentes virtuales. Para ello dispone de 'Chatbot', es un 'bot' bancario basado en IA que "conversa" con los usuarios y permite obtener información personal sobre una cuenta a través de Facebook y Telegram. Ahora, este 'bot' también permite a los usuarios enviar dinero a través de las aplicaciones de mensajería. Y en el caso de aquellos que usen el sistema operativo iOS (iPhone), podrán realizar esta operación a través del asistente de voz, Siri.
Experiencias mixtas y envolventes
Descubrir en qué ámbitos de la vida real se pueden usar y aplicar la realidad virtual (VR) y la realidad aumentada (AR) es el reto de las empresas para el próximo año. De momento, se trata de un mercado fragmentado y todavía en pleno despegue. Pero según Gartner, la llegada de una ‘realidad mixta’ combinada con las plataformas de conversación puede ayudar a crear una nueva generación de experiencias “envolventes e invisibles”, donde el usuario interactúa con objetos tanto digitales como reales, mientras mantiene su presencia en el mundo físico.
Las gafas de realidad virtual de Facebook, Oculus Go, saldrán al mercado a principios de 2018.
Este salto será esencial para dejar de ver estas herramientas como algo destinado únicamente al ocio. Según Gartner, durante los próximos cinco años estos nuevos espacios de realidad mixta harán posible adaptar esta tecnología a entorno laborales específicos como la formación. Además, el lanzamiento de los distintos gigantes tecnológicos (como Apple y Google) de sus propias plataformas de VR y AR hará que 2018 sea un “campo de batalla” para los desarrollos de esta tecnología basados en el ‘smartphone’.
'Blockchain' integrado en los negocios
‘Blockchain’ es una tecnología de registro descentralizado (‘distributed ledger technology’ o DLT) que se creó originalmente para las transacciones con criptomonedas, pero cuyo impacto promete hoy cambiar industrias como el transporte, la logística, la alimentación o el sector financiero.
En un plazo de entre dos y tres años, según Gartner, ‘blockchain’ alcanzará la madurez necesaria para desarrollar aplicaciones y soluciones reales aunque también advierte de la necesidad de crear un marco regulatorio que ampare la exploración de esta nueva tecnología. La consultora destaca algunos de los retos que deberán afrontar las empresas que apuesten invertir en ella: identificar la manera de integrarlo con las infraestructuras existentes y monitorizar la evolución y maduración de las plataformas.
BBVA comenzó hace cuatro años a trabajar con ‘blockchain’ y actualmente es miembro de tres consorcios que exploran el potencial de esta tecnología para crear estándares comunes y construir plataformas eficaces: R3, Hyperledger y EEA.
Recientemente, BBVA ha realizado la primera transacción de comercio internacional basada en 'blockchain' entre Europa y América Latina. El piloto, realizado con Wave, ha logrado reducir a 2,5 horas el envío, verificación y autorización de una transacción de importación-exportación que normalmente se prolonga entre 7 y 10 días.
En el último año BBVA ha colaborado con R3 en varios proyectos como el desarrollo de una plataforma para rediseñar la infraestructura de las operaciones de ‘trade finance’ a través de ‘smart contracts’ y la creación de un sistema de gestión de identidades basado en ‘blockchain’. Además, BBVA y BBVA Bancomer están participando en un proyecto piloto de tecnologías DLT para la operativa de divisas y, en abril de 2017, BBVA realizó el primer piloto real de transferencias internacionales basado en la tecnología DLT de Ripple.
Decisiones basadas en 'eventos'
La convergencia del internet de las cosas con la analítica avanzada en los ecosistemas digitales ha supuesto la aparición de un nuevo concepto: el ‘event thinking’. Esta tendencia hace referencia a la toma automática de decisiones dentro de un negocio desencadenada por una serie de eventos preestablecidos. Es decir, dada una situación “x” en un contexto determinado, los sistemas deben ser capaces de activar “y”.
Según Gartner, en 2020 el 80% de los negocios y soluciones digitales tendrá que dar soporte a este tipo de mecanismos para tomar decisiones en tiempo real basándose en los datos recogidos sobre su entorno.
El 'event thinking' implica diseñar estrategias de negocio dinámicas y capaces de operar en tiempo real.
Gestión del riesgo en tiempo real
A medida que los ecosistemas digitales se vuelven más complejos y sofisticados, también lo hacen los riesgos para la seguridad. Gartner plantea que la solución para afrontar el contexto de creciente preocupación es optar por un modelo denominado CARTA (Continuous adaptive risk and trust assessment), que permite la toma de decisiones en tiempo real para adaptarse a los cambios en los niveles de riesgo y ofrecer respuestas inmediatas, flexibles y a medida. Según la consultora, este enfoque implica adoptar una visión proactiva de seguridad, centrada en las personas y en el papel de los desarrolladores.
Esta estrategia incluye técnicas como los ‘honeypots’ (tarros de miel), herramientas que sirven para ‘engañar’ a los atacantes poniendo trampas que los atraen al sistema para después neutralizarlos. Gartner pronostica un futuro prometedor para este nuevo enfoque (según sus estimaciones, en 2018 un 10% de las empresas ya usarán técnicas de engaño), que permite detectar amenazas que pasarían desapercibidas por los sistemas habituales de ciberdefensa.
En 2018, será necesario mejorar los sistemas de ciberseguridad para hacer frente a las crecientes amenazas.