Industria automotriz, uno de los principales motores de la economía mexicana
Una de las industrias de mayor auge en la economía mexicana es la automotriz, porque desde la producción de autopartes hasta el ensamblado de autos y su conexión con el mercado internacional han tenido un desempeño favorable.
En años previos hemos observado un crecimiento de esta industria y estimamos que la producción de vehículos aumentará 1,5% durante 2016 respecto al año previo, a pesar de un inicio de año poco favorable por una caída de 3,1% en la primera mitad de este año. Esto representa un aumento de alrededor de 51.000 unidades. En el siguiente año se podrían producir poco más de cuatro millones de unidades lo que representaría un avance de 17,4% para el 2017, lo que nuevamente situaría a la industria a la vanguardia de la economía mexicana.
La producción automotriz en México ha cobrado importancia por las grandes inversiones que se han hecho en el país para atender el mercado nacional, pero primordialmente por el potencial del mercado externo. Hasta el 79% de los autos manufacturados en el país se destinan a la exportación, primordialmente a los Estados Unidos de América. Durante el primer semestre de este año se fabricaron 1,3 millones de vehículos para ser exportados, lo que significó una reducción de 5,6% si lo comparamos contra el primer semestre del año anterior. Este menor dinamismo se debe en parte a que se compara contra lo realizado en 2015 cuando se observó un incremento extraordinario del 10,4%.
La mayoría de las exportaciones del sector automotriz tienen como destino los Estados Unidos y continuarán creciendo durante este año. En contraste, otras regiones y países han disminuido su demanda por vehículos mexicanos, como es el caso de Canadá, Latinoamérica, Asia y Europa. Este resultado es atribuible, entre otras cosas, a una menor demanda en estos países atribuible a una lenta expansión de sus economías.
La mejor perspectiva en la segunda parte del año para la producción y la exportación se sustenta en el fortalecimiento de su mezcla de productos para enfrentar la mayor demanda de camiones ligeros del mercado de Estados Unidos. En el segundo semestre del año actual, México lanzará a los mercados de exportación una camioneta urbana familiar de lujo de la marca Audi fabricada en Puebla. Asimismo, Fiat Chrysler Automobiles (FCA) fabricará en Toluca, Estado de México, un nuevo Crossover compacto destinado a su marca Jeep, cuya producción arrancará también en el segundo semestre para abastecer tanto el mercado nacional como el de exportación.
Las ventas de vehículos en México en niveles nunca antes vistos
Si bien el mercado internacional de autos ha mostrado menor dinamismo, el mercado nacional por el contrario avanza a tasas elevadas. En los primeros seis meses del año, las ventas de vehículos en México sumaron 722.000 unidades, equivalente a un crecimiento de 18.4% comparado contra el mismo periodo del año previo. El sostenido crecimiento de estos años obedece principalmente a una oferta de crédito variada y competitiva de parte del sector bancario y de los brazos financieros de las armadoras automotrices, así como de la mejora de la confianza del consumidor. El panorama de la venta de vehículos nuevos para lo que resta del año en México es prometedor si se mantiene el buen ritmo del número de créditos automotrices observado hasta ahora. De enero a junio el financiamiento creció un 25,3% anual considerando tanto a las financieras, a la banca e incluso el autofinanciamiento. Al concluir 2016, se estima un avance de las ventas de vehículos nuevos de 13,8% equivalente a 1.530.000 unidades.
Autopartes
Una revisión del mercado automotriz debe considerar también la producción de autopartes. En este caso, del total de autopartes producidas en el país, el 60% se destina al mercado de Estados Unidos y Canadá. La baja en la producción de vehículos en México ha influido relativamente poco; sobre todo si se considera la apertura de las nuevas plantas de Kia y de Audi, así como la demanda de más componentes relacionados con la seguridad de los automóviles, como bolsas de aire o frenos ABS.
Finalmente, debido a que prevalece la debilidad del comercio internacional y la incertidumbre sobre la economía global, México debe ser cauteloso y mantener su capacidad productiva actual y estimada de vehículos automotores en los mejores niveles ocupación, y estar preparado ante un eventual cambio en las preferencias de los consumidores internacionales de autos.