El homenaje de Joan Roca a su madre en Madrid Fusión
No es un secreto que la mayor inspiración de El Celler de Can Roca se encuentra a tan solo 100 metros de su cocina, en el restaurante de sus padres. Allí, origen y tradición conviven día a día con la alta gastronomía. Joan Roca ha querido honrar la cocina de toda la vida en la segunda jornada del Madrid Fusión acompañado por su mejor representante, Montserrat Fontané.
Madre e hijo subieron al escenario para presentar la ponencia ‘La importancia del origen’, dentro de la jornada ‘Saborea España’. En ella, Joan Roca recalcó la importancia de los valores y el conocimiento transmitido generación tras generación en un emotivo homenaje a todas las madres, y en especial a la suya, que le ha inculcado los conocimientos y la pasión por la cocina. “Ella es mi ídolo, es la crítica más dura. Te dice sin tapujos si algo está bueno o no lo está”.
Montserrat Fontané, que a sus 81 años sigue al frente de los fogones de Can Roca, alimenta cada día a los 70 empleados que trabajan junto a sus hijos. “Lo que hacemos en El Celler de Can Roca es para celebrar algo, vivir una experiencia gastronómica, comer un día muy de vez en cuando. Lo que importa es la cocina de diario, la que nos alimenta el cuerpo y el alma”, afirma el mayor de los hermanos. Y es que, tal y como han comentado en más de una ocasión, comer en el restaurante de sus padres ayuda los Roca a tomar distancia del éxito glamuroso y los reconocimientos y recuperar la normalidad.
Joan Roca en la cocina de Can Roca con su madre Montserrat Fontané - El Celler de Can Roca
A pesar de que sus hijos sean reconocidos como los mejores cocineros del mundo, Montserrat no está dispuesta a subir el precio de su menú casero, el cual lleva décadas ofreciendo por 10€. “Qué culpa tienen nuestros clientes de que nuestros hijos se hayan hecho famosos”.
Durante una hora, ambos cocineros estuvieron deleitando al auditorio con sus historias y con recetas inspiradas en los platos favoritos de Montserrat, como los higadillos de conejo o la sopa de hierbabuena. “Es la cocina de la sencillez, que de vez en cuando merece la pena recuperar”, sostiene Joan.
En El Celler de Can Roca están muy presentes los orígenes y la memoria. Uno de las creaciones más importantes es el ya mítico ‘Memorias de un bar de barrio’, un desplegable con fotos de la infancia de los tres hermanos que representa el local de sus padres. Joan Roca subió al escenario de Madrid Fusión este famoso entrante compuesto para la ocasión por bocados de escabeche de mejillones, un canelón tradicional, patatas bravas e hígado de conejo. Estas piezas representan una versión vanguardista de las tapas tradicionales que se pueden encontrar en la barra de Can Roca.
Joan Roca y Montserrat Fontané forman la perfecta simbiosis entre tradición y vanguardia. Si algo nos enseña este vínculo familiar es que no hay que olvidar los orígenes.