Hobart 2014: el primer título de Garbiñe Muguruza
11 de enero de 2014. 20 años. Garbiñe Muguruza estrenaba su palmarés con su primer título WTA en Hobart (Australia). Era la tenista española número 14 que conseguía este hito en la historia de un torneo del circuito femenino mundial.
La capital de Tasmania asistía al nacimiento de una nueva estrella para el tenis español. Garbiñe había accedido al cuadro final del Hobart International procedente de la fase previa, y levantó el título sin haber cedido ni un solo set.
Fue una final perfecta para Muguruza. La checa Klara Koukalova, séptima favorita del torneo y mejor situada en la final, sólo presentó oposición en la primera manga. En la segunda, la joven española se anotó el set en limpio y por tanto la victoria (6-4 y 6-0) y el premio.
Premio que le llegaba después de verse apartada de las pistas de juego durante seis meses por una lesión de tobillo que le obligó a pasar por quirófano. 298 puntos para colocarse 38ª en el ránking WTA, la mejor clasificación de su carrera.
Aunque Garbiñe ya sabía lo que era ganar en Hobart. El 12 de enero de 2013 había levantado el título en la categoría de dobles junto a la también española Tita Torró, tras ganar en la final a la húngara Timea Babos y la luxemburguesa Mandy Minella, por 6-3 y 7-6(5).
Garbiñe Muguruza durante la final de Hobart 2014
El camino hasta la final de Hobart
Setenta minutos solamente necesitó Garbiñe en la final para clausurar una excelente semana en Tasmania. Pero el camino hasta la final había comenzado en la ronda previa.
La joven española eliminó a las belgas An-Sophie Mestach (6-1 y 6-1) y Yanina Wickmayer (4-2, ret) para acceder a cuartos de final, donde dio la campanada deshaciéndose de la cabeza de serie número 2 y semifinalista de Wimbledon, la también tenista belga Kirsten Flipkens. (6-4 y 6-3).
En semifinales se interponía en su camino otra española, la sevillana Estrella Cabeza, a la Garbiñe eliminó por un por un contundente 6-0 y 6-1 en apenas 45 minutos. Se convertía así en la tenista española número 18 que alcanzaba una final en la historia de la WTA.