¿Ha aumentado la concentración bancaria en la crisis?
La concentración bancaria ha aumentado de forma muy significativa tanto en Europa como en España. Las entidades se han ido fusionando o bien para potenciar su rentabilidad o eficiencia, o bien porque ha sido necesario absorber algún competidor más vulnerable. Ana Rubio, de BBVA Research, explica la situación actual y la posibilidades en el futuro.
La concentración bancaria no debería ser preocupante desde el punto de vista del cliente, a no ser que afectara a los productos y servicios que se ofertan; es decir, si las entidades llegaran a acuerdos entre ellas para ofertar menos productos o para hacerlo a precios superiores.
Según la teoría económica, no necesariamente más concentración lleva a más competencia. En realidad, hay otras variables, como pueden ser la solvencia institucional del país, o la facilidad de entrada o salida de competidores, que hacen un efecto superior sobre la competencia que la mera concentración.
En general, la concentración se puede medir de diferentes maneras. Por ejemplo, usando el Índice de Herfindahl, España ha aumentado su concentración, pero todavía estamos por debajo de países de nuestro entorno como Bélgica, Holanda, o Portugal; y estamos por debajo de mil, que es el tope que los economistas fijan para hablar de un mercado muy competitivo.
Nosotros desde BBVA Research hicimos un ejercicio intentando ver si la concentración estaba afectando al proceso de fijación de precios del crédito. Y repetimos este ejercicio para carteras como el crédito de vivienda, el crédito a pymes, el crédito a grandes empresas en España, Italia, Francia y Portugal. Y en el único sitio donde nos salió significativa la variable de concentración fue en el crédito a pequeñas y grandes empresas en Portugal. Por lo cual, en principio, no habría problemas de competencia en España.
¿Hay espacio para una mayor concentración en el futuro?
Sí, porque tenemos en cuenta que, a futuro, esperamos la entrada de nuevos competidores tanto desde el mundo digital como desde una Europa cada vez más integrada, y eso hará que los niveles de concentración actuales sean menos relevantes.