Garbiñe Muguruza, a octavos de Roland Garros por la vía rápida
Garbiñe Muguruza da otro pasito más en Roland Garros. La española ha vuelto a ser un auténtico vendaval sobre la tierra batida parisina. En cuanto se acomodó en la pista dio una lección de tenis para eliminar a la belga Yanina Wickmayer en dos sets, 6-3 y 6-0.
Garbiñe Muguruza y Yanina Wickmayer abrieron este viernes la Pista Central de Roland Garros. Primeros juegos de tanteo entre la española y la belga. Pero a partir del séptimo juego del partido la cuarta favorita en París apretó el puño para resolver el partido, sin sobresaltos, por la vía rápida, en una hora y tres minutos, 6-3 y 6-0.
Wickmayer sirvió de inicio y se apuntó el juego con facilidad. Muguruza hizo lo propio defendiendo su saque. Aunque aún no se encontraba cómoda con su tenis, logró el primer break y la confirmación aprovechando los nervios de la belga y sus continuos errores no forzados.
Los siguientes minutos Wickmayer buscó reengancharse al partido y por momentos lo logró. Una serie de puntos extraños por parte de Garbiñe terminaron beneficiando a la belga que logró establecer de nuevo la igualdad en el marcador.
Llegó entonces el séptimo juego, un punto de inflexión en el tenis de la española, que comenzó a moverse con comodidad por la Philippe Chatrier. Garbiñe confirmó adjudicándose un servicio y dos roturas por qué es una de las favoritas en este segundo Grand Slam de la temporada, cerrando el primer set (6-3) en 39 minutos, con un último punto excelente.
Garbiñe Muguruza en partido de tercera ronda de Roland Garros 2016 contra Yanina Wickmayer. Foto: EFE
En la segunda manga Garbiñe Muguruza dio una auténtica lección de tenis. La española tenía claro su objetivo y así lo demostró con un auténtico repertorio de golpes. Sólo un minuto necesitó para anotarse el 1-0 con un juego en limpio. Al término del mismo la cuarta cabeza de serie había logrado 20 puntos consecutivos.
Después llegó el primer break de este segundo set para la española. Wickmayer se desinflaba mientras Garbiñe alcanzaba su mejor nivel tenístico y el público presente en la pista aplaudía la lección que estaba ofreciendo la número 4 del mundo.
Con dos roturas más, se anotó 6 de 6, y un saque directo en su último servicio (logró el 72 % de los puntos con el primer saque) llevaron a Muguruza a sellar el pase a octavos de final de Roland Garros, donde se enfrentará a la vencedora del partido entre Svetlana Kuznetsova y Anastasia Pavlyuchenkova.