La FCA estudia la creación de un 'sandbox regulatorio' global
Desde su lanzamiento en 2016, el ‘sandbox’ del regulador británico FCA ha ayudado a 60 empresas emergentes a poner a prueba sus modelos de negocio en un entorno controlado. Ahora, se plantean cómo escalar el formato a nivel global para resolver los retos de operar internacionalmente en el mercado ‘fintech’.
A lo largo de este tiempo, la FCA (Financial Conduct Authority) ha aprendido una serie de lecciones sobre las necesidades de las ‘startups’, y una de ellas es la de operar a escala global, también durante la fase de exploración: “Nuestro ‘sandbox’ actualmente solo permite realizar tests en el Reino Unido, pero muchos aspectos de los mercados financieros y el ‘fintech’ son globales”, explican en un comunicado. Según apuntan, a lo largo de este periodo han constatado que muchas firmas valoran especialmente la posibilidad de poder trabajar con otros reguladores para realizar pruebas en “más de una jurisdicción”.
Estas observaciones han llevado a la FCA a lanzar una consulta abierta sobre la posibilidad de llevar a cabo un ‘sandbox' regulatorio global. La iniciativa permitiría a las ‘startups’ realizar pruebas en distintas jurisdicciones y, al mismo tiempo, abrir un canal de colaboración entre reguladores de distintos países. Este nuevo formato también daría la oportunidad a los reguladores de identificar problemas comunes y trabajar juntos para encontrar soluciones.
Para recabar opiniones y propuestas sobre cómo poner en marcha una plataforma de estas características, la FCA ha publicado un cuestionario abierto y anima tanto a reguladores, como empresas y otras entidades interesadas, a que envíen sus ideas acerca del proyecto.
Por su parte, proponen una serie de principios de partida con los que consideran que el ‘sandbox’ global debería contar para poder llevarse a cabo de forma efectiva. Por un lado, debería enfocarse en invitar a los candidatos a resolver retos específicos preidentificados. Por ejemplo, soluciones de pagos o mecanismos antifraude internacionales. “Bajo este enfoque, los reguladores podrían definir áreas en las que las pruebas transfronterizas serían más beneficiosas”, explican.
La FCA también considera que un ‘sandbox’ global debería centrarse en apoyar a empresas que tengan un especial interés en operar a nivel internacional, para ayudarles a crecer y escalar sus modelos más rápidamente para favorecer una competición más efectiva.
El interés de la FCA por dar cabida a los proyectos internacionales en su marco de acción es claro. En esta misma línea, el organismo ha firmado un acuerdo con la Commodity Futures Trading Commission (CFTC) de EE.UU., en el que se comprometen a colaborar en el apoyo conjunto a las firmas 'fintech' a través de las iniciativas regulatorias de ambos países: por el lado británico, mediante el 'sandbox' y otros proyectos en el marco de FCA Innovate; y por el norteamericano, mediante la iniciativa LabCFTC, un 'hub' de apoyo a las empresas de tecnología financiera. "Las fronteras internacionales no deberían ser barreras para la innovación y la competición en los servicios financieros", ha señalado Andrew Bailey, Chief Executive de la FCA.
Objetivos cumplidos
Desde su apertura, la entidad reguladora de Reino Unido ya ha llevado a cabo tres rondas de pruebas con ‘startups’ en su 'sandbox' regulatorio. En diciembre de 2017 anunció a las firmas aceptadas en la tercera ronda y también abrió la convocatoria para encontrar a los candidatos para la cuarta, que deberá entrar en el entorno de pruebas en junio.
La FCA ha aprovechado la ocasión para trasladar los objetivos que considera cumplidos desde que se puso en funcionamiento su plataforma: según la entidad, el 90% de las firmas que pasaron por la primera ronda de pruebas ha logrado llegar al mercado. Y al menos un 40% de las firmas de la misma ronda obtuvieron financiación durante o al finalizar su paso por el ‘sandbox’.
Además, la FCA afirma que ha alcanzado su objetivo de dar una oportunidad a las empresas para probar la viabilidad comercial de productos, la posible aceptación de los precios por parte del público, los canales de comunicación con clientes, modelos de negocio y las propias tecnologías en sí mismas. Al mismo tiempo, la FCA valora como un éxito el haber logrado diseñar un mecanismo de protección de los consumidores integrado en el proceso de creación de productos y servicios innovadores.
Carlos Torres Vila, consejero delegado de BBVA, se ha mostrado a favor de la creación de este tipo de entornos en España en los que las empresas puedan probar productos y servicios financieros sin necesidad de cumplir con toda la regulación aplicable. También ha destacado el interés de ampliar el alcance de estos entornos de pruebas más allá del sector financiero, para llevarlos al campo de la protección de datos y la ciberseguridad.
Un ámbito tecnológico que podría beneficiarse de un 'sandbox' en España es el de 'blockchain', como reclamaron algunos de los mayores expertos y promotores de esta tecnología durante una mesa dedicada a los retos financieros del Foro Latibex, celebrada en BME.