Envío y recepción de remesas, una dinámica global

Una de las realidades más acuciantes de las remesas a escala global es que si bien para todos los países receptores resultan relevantes para sus economías, hay naciones con una marcada dependencia de ellas, como Nepal (32.2% de su Producto Interno Bruto), Liberia (31.2), Tayikistán (28.8), Kirguistán (25.7) y Haití (24.7).

“El comportamiento de las remesas comúnmente representa uno de los principales indicadores de la migración. Estos flujos evidencian los movimientos de envío y recepción de dinero entre los migrantes internacionales en los lugares de destino y sus familias y/o comunidades de origen”, anotan los analistas e investigadores de este Anuario de migración y remesas que se ha convertido en un referente en la materia desde que empezó a publicarse en el año de 2012.

¿Hacia dónde van las remesas?

Desde 2010, las remesas habían tenido una variación porcentual anual positiva que se interrumpió en 2015, cuando cayó 2.7%; aunque esta disminución fue inferior a la registrada en 2009, cuando disminuyeron 6.2%. La recuperación en el flujo de remesas entre 2015 y 2016 fue de 0.8%. Se pronostica que en 2018 las remesas llegarán a 629 mil millones de dólares.

En 2015, el envío de remesas hacia países en desarrollo representó 75.5% del total. Para 2018 se estima que las regiones con el mayor flujo anual de remesas serán Asia Oriental y el Pacífico (29.5%), Asia del Sur (25.4%) y América Latina y el Caribe (16.5%). El orden de las dos últimas regiones se invertirá con relación a 2005.

Durante 2015 se registró un flujo de remesas de 580,594 millones de dólares, de las cuales 83.0% procedía de naciones desarrolladas y 17.0% de países en vías de desarrollo. De acuerdo con los flujos intraregionales, el mayor volumen se reportó entre países desarrollados y el menor monto en Medio Oriente y el Norte de África.

Los países que reciben más remesas

Seis naciones concentran 50% del flujo de origen de las remesas mundiales. En el primer lugar se ubican los EUA, donde se emite casi una cuarta parte del total de remesas (23.3%), el otro 26.1% se origina en Arabia Saudita (8.1%), Emiratos Árabes Unidos (5.6%), Reino Unido (4.4%), Canadá (4.1%) y Alemania (4.0%).

Diez países reciben 51.4% del total de las remesas mundiales. India, China y Filipinas reúnen 27.3% y ocupan el primero, segundo y tercer lugar, respectivamente. México se ubica en el cuarto sitio, con 4.8%; mientras que Francia en el quinto, con 4.1%.

La fuerte dependencia de las remesas

Nepal, Liberia y Tayikistán son las tres economías en el mundo más dependientes de las remesas. A diferencia del año previo, en 2015 Nepal pasó del tercer al primer lugar. Liberia también subió cuatro posiciones, llegó al segundo puesto tras haber ocupado el sexto y Tayikistán –que antes fue parte de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas, URSS- descendió del primer al tercer lugar. De la región latinoamericana, Honduras aparece entre los 10 países con mayor dependencia de las remesas.

Los EUA participan en seis de los 10 principales corredores de remesas en el mundo: dos en el continente americano, con México y Guatemala, así como cuatro en el continente asiático, con China, India, Vietnam y Filipinas. India está relacionado con tres corredores como país receptor de remesas, con Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, además de los EUA.

En 2016, el costo global promedio para enviar $200 dólares fue de 7.4% del monto enviado, seis décimas porcentuales menos que en 2014. Las regiones de África Subsahariana y Asia Oriental y el Pacífico superaron el costo promedio global con 9.5% y 8.2% del monto enviado, respectivamente; mientras que la región con menor costo fue Asia del Sur.

Dinero va y dinero viene, y las remesas circulan por el mundo, a la par de muchas historias humanas: las de los migrantes y sus familias.