Una enorme Garbiñe Muguruza se mete en la final de Wimbledon
No lo dudó y fue a por su pase a la final por la vía rápida. Garbiñe exhibe en Wimbledon un juego compacto y sin fisuras. Doble (6-1) en algo más de una hora para dejar sin opciones a Rybarikova. La embajadora de BBVA es firme candidata al título por el juego exhibido desde las primeras rondas del torneo. Venus Williams será la última prueba para la española para hacerse con su segundo Grand Slam.
La pista central del All England Club acogía puntual a las dos jugadoras. Garbiñe comenzaba ganando su saque atacando desde la red. La española controlaba los nervios y dejaba hablar a la raqueta. Pronto se adelantaría con una rotura, para consolidar su saque en el siguiente juego y plantarse 3-0 en apenas 10 minutos. Garbiñe tenía completamente ganada la línea de fondo a Rybarikova, que por momentos se notaba anulada. La número 87 del mundo tardaba en entrar en partido pero Garbiñe era consciente de su potencial. El camino de la eslovaca hasta la semifinal no había sido nada fácil, eliminando a Pliskova, clara favorita del torneo, en segunda ronda. Por su parte, Muguruza mantenía el nivel mostrado estas semanas, muy segura y confiada.
Rybarikova buscaba soluciones, tiraba de dejadas, voleas, globos, pero Garbiñe respondía a todo planteamiento. Con todo de cara, la eslovaca despertaba en el 5-0, ganaba su juego e impedía el rosco de Muguruza. Solo una concesión de la española, que ataba el primer parcial (6-1) con contundencia.
Garbiñe Muguruza durante la semifinal de Wimbledon - EFE
Mismo ritmo y misma actitud de Garbiñe al inicio del segundo set. Rotura en la primera oportunidad, saque y nueva rotura. La eslovaca se desesperaba por momentos y es que todo le salía a Muguruza. 4-0 a favor de la embajadora de BBVA y punto para Rybarikova, aunque poco podía hacer ya. Una enorme Garbiñe se metía en su segunda final en Wimbledon en tres años, tercera en un Grand Slam. Conchita Martínez, que la entrena estos días, celebraba desde una grada que la vio ganar.
Garbiñe llega a la final de Wimbledon después de una temporada irregular en la que bajó del top 10. Pase lo que pase, Muguruza volverá a situarse entre las 10 mejores raquetas de la WTA. Al otro lado de la red, Venus Williams intentará frenar a una Garbiñe que a día de hoy, parece imparable.