El sueño americano ligado al flujo de remesas en México y Centroamérica
La necesidad de las personas de migrar a otros países en busca de mejores oportunidades genera un impacto considerable para la economía de su país de origen por concepto de remesas. Pero detrás del favorable contexto económico, las cifras también demuestran que el sueño americano sigue impulsando el fenómeno migratorio en el mundo.
Juan José Li Ng, economista senior de BBVA Bancomer, señala que durante el 2018 México nuevamente tuvo récord histórico por ingreso de remesas con un monto de 33,500 millones de dólares, que es el 3% del Producto Interno Bruto (PIB); con una remesa promedio de 321 dólares, de las cuales dependen 1.6 millones de hogares y que representa un crecimiento de más de 10% con respecto a 2017.
El entorno económico en Estados Unidos ha motivado que la población en Centroamérica se sume a la ola migratoria hacía ese país
Li destaca que este incremento en las remesas tiene dos razones fundamentales. La primera es el crecimiento moderado del número de migrantes en Estados Unidos en los últimos dos años, y la segunda es la tasa de desempleo, que es históricamente baja en ese país, de alrededor del 4.0% durante 2018. Para 2019 las remesas en México podrían crecer 7% y llegar a un monto de 36,000 millones de dólares.
De acuerdo con el especialista, el entorno económico en Estados Unidos ha motivado que la población en Centroamérica se sume a la ola migratoria hacia ese país, movimiento que se ha hecho visible a través de las caravanas migrantes que pasan por México procedentes de Honduras, Guatemala y El Salvador.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) indica que existen 1.6 millones de migrantes salvadoreños, 1.1 millones de guatemaltecos y 700,000 hondureños, quienes radican en Estados Unidos, en California, Texas y Florida. Li detalla que, “en 2018, Guatemala recibió más de 9,000 millones de dólares por remesas, que equivale a 12% de su PIB; al Salvador ingresaron 5,500 millones de dólares, 21% del PIB, y a Honduras entraron poco menos de 5,000 millones de dólares, cercano a 20% de su PIB”.
Li precisa que el flujo migratorio hacia Estados Unidos continuará en 2019 y 2020 debido a la brecha salarial que impera entre las economías. México sin duda deberá estar preparado para recibir e integrar social y económicamente a algunos de estos migrantes que pasan por el territorio mexicano y deciden quedarse.