El CES 2019 corona a los asistentes domóticos
La principal feria tecnológica asienta a Alexa, Siri y similares como los intermediarios obligatorios de los electrodomésticos inteligentes.
"Alexa, ponme el capítulo tres. Siri, sube la temperatura dos grados". Estas conversaciones con inteligencias artificiales se van a hacer la norma. La edición 2019 del Consumer Electronic Show (CES), la feria tecnológica de consumo más importante del mundo que se celebra año a año en el Centro de Convenciones de Las Vegas, ha consagrado a los asistentes de voz. Las principales webs especializadas del mundillo, de CNET a Xataka, han sido unánimes en el diagnóstico: el CES se ha vuelto loco por la inteligencia artificial. Y en concreto por estos asistentes domóticos a los que podemos hablarles.
El rol de Siri, Alexa o Google Home es tan crucial como lo fue en su momento el de Windows o Linux o el de Android e iOS en los ‘smartphones’. Los asistentes de voz tienen la responsabilidad de convertirse en el intermediario entre los deseos del usuario y el dispositivo que debe acometer la tarea. Se trata de una lucha por convertirse en el estándar más usado de un inmenso mercado que se calcula que en solo dos años superará los 3.000 millones de euros, según predice la consultora Gartner.
La carrera por convertirse en ese Windows de la domótica tiene a dos actores principales: Google y Amazon. En este CES 2019, han sacado sus colores a los ‘stands’ con cientos de productos inteligentes que se entienden con sus asistentes. Ambos han dado cifras de impacto: en el caso de Amazon, 100 millones de Echo vendidos, el altavoz domótico que permite comunicarse con Alexa. La cifra del asistente de Google es 10 veces superior, pero también incluye todas las instalaciones en teléfonos móviles.
Hace un par de años, Ranjit Atwal, investigador jefe de Gartner, declaraba a Techcrunch lo siguiente: “Hacemos demasiadas cosas con el móvil y probablemente hemos llegado al punto de que nos gustaría tener dispositivos suplementarios que asuman parte de esa carga […]. Una manera con menos roces de cumplir nuestros deseos y necesidades. El Echo (el dispositivo domótico de Amazon) es un ejemplo de ello porque lo usas de manera directa con tu voz, sin tener que interactuar con ‘apps’. Pero para sacar lo mejor de estas capacidades, tiene que haber dispositivos dedicados”.
Precisamente el CES 2019 ha sacado a relucir esta variedad de dispositivos dedicados. Tanto los que ya pueden comunicarse con estos asistentes como la creciente inteligencia de esa conversación a tres bandas (humano-asistente-máquina y viceversa). La nueva línea de lavadoras Whirpool obedecen órdenes tanto de Alexa como de Google Assistant. El nuevo televisor enrollable de LG, una de las estrellas de esta edición, ha evolucionado su dimensión domótica hasta poder prescindir por completo del mando a distancia o entender comandos complejos como: “búscame la banda sonora de esta película” o “apágate en cuanto termine el programa”.
El introducirse en este mundo domótico tiene sus pasos. Tanto Google como Amazon cuentan con extensas guías en sus webs para explicar cómo hacer que sus asistentes se conecten a los diversos dispositivos ‘smart’ que tengamos en nuestro hogar. No es un listado baladí o sencillo. El de Google cuenta con 22 pasos. El de Amazon es algo más breve, pero también prolijo en detalles. A pesar de esta complejidad, el CES 2019 ha dejado claro que Alexa y compañía se convertirán en un compañero tecnológico tan habitual como el ‘smartphone’ en nuestro día a día, una voz atenta a nuestros deseos las 24 horas del día.