Análisis financiero: ¿Qué incluye el margen de intereses de un banco?
El margen de intereses es la diferencia, en euros, entre los ingresos financieros y los costes financieros; es decir, la diferencia entre la rentabilidad del activo (los créditos, y préstamos que la entidad tiene en su balance, principalmente) y los intereses que paga el banco por los recursos que necesita para financiar ese activo (como los depósitos de la clientela y la financiación mayorista).
El margen de intereses es diferente de otro indicador que a menudo encontramos en la información financiera facilitada por las entidades: el diferencial de la clientela. Mientras que el primero es una de las líneas de la cuenta de resultados típica de un banco y, por tanto, la encontraremos expresada en euros (o en la divisa en la que estén expresados los estados financieros de la entidad), el diferencial de la clientela es un ‘spread’ que se calcula como el rendimiento medio de la cartera crediticia de la entidad menos el coste medio de los depósitos de sus clientes.
Por último, tampoco hay que confundir el margen de intereses de la cuenta de resultados con el margen de intereses sobre activos totales medios (o NIM, por sus siglas en inglés). Este último es un indicador de la rentabilidad (expresada como porcentaje) del activo de una entidad financiera.
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