¿Qué banco necesita el mundo?
A lo largo de más de un siglo y medio, la actitud de BBVA se ha mantenido intacta. Una actitud de búsqueda del progreso y de escucha atenta a las necesidades de la sociedad, que ha buscado siempre anticiparse para encontrar la mejor manera de acompañar a personas y empresas para avanzar en sus proyectos, porque todo el que tiene un proyecto es capaz de construir un futuro mejor.
La primera tarjeta de crédito llegó a nuestro país de la mano de Banco Bilbao en 1971. Esta innovadora herramienta financiera revolucionó el sistema de pagos en el país, introduciendo un método de crédito que permitía realizar compras sin necesidad de dinero en efectivo. Su aparición en el mercado no solo facilitó las transacciones comerciales, sino que también contribuyó a la modernización del sector bancario español.
Más de medio siglo después, la tarjeta ha evolucionado significativamente, incorporando tecnologías avanzadas, como el PIN o el ‘contactless’, y adaptándose a las nuevas demandas del consumidor. Desde su introducción, BBVA ha continuado liderando en el ámbito de las soluciones financieras, ampliando su oferta de tarjetas con características innovadoras.
En 2020, BBVA lanzó Aqua, la primera tarjeta sin numeración visible y con CVV dinámico, marcando un hito en seguridad financiera. Esta innovadora tarjeta, diseñada para proteger la información del usuario y reducir el riesgo de fraude, elimina los números impresos en la tarjeta y utiliza un código CVV dinámico, que cambia con cada compra ‘online’. Esta medida asegura que, incluso si la tarjeta es robada o se pierde, los datos de pago no pueden ser utilizados por terceros.
En 1975, España abolía el permiso marital, la autorización legal que toda mujer casada necesitaba para poder trabajar, viajar fuera del país o gestionar una propiedad. Con seis años de antelación, el Banco de Bilbao fue pionero en lanzar una campaña publicitaria dirigida a las mujeres, bajo el lema ‘¿Un banco que se preocupa por nosotras?’.
El servicio del denominado Banco de la Mujer se implantó en las grandes sucursales de España desde 1973 y el personal, de estas cerca de 300 oficinas, estaba básicamente formado por empleadas. El objetivo era ofrecer un servicio específico con asesoramiento financiero y comercial a la mujer, que permitía realizar determinados trámites bancarios sin autorización de un tutor legal. Esta apuesta por la inclusión femenina ha sido una constante a lo largo de los años, evolucionando hacia políticas internas de igualdad, como la eliminación de sesgos en la contratación y promoción de mujeres en la organización.
Actualmente, BBVA mantiene una política activa de promoción del talento femenino y de conciliación laboral, que busca garantizar la equidad en todos los niveles profesionales dentro de la compañía. En ese sentido, la entidad ha implementado medidas que favorecen el desarrollo profesional de las mujeres, promoviendo las mismas oportunidades en el acceso a puestos de liderazgo y fomentando la diversidad como un valor esencial dentro de la empresa.
En 1902, Banco de Bilbao se convierte en el primer banco español con presencia internacional al abrir una sucursal en París. Posteriormente, expande su red con la apertura de oficinas en Londres y Tánger, consolidándose como la única entidad española con red internacional propia. Los bancos españoles han acompañado a las empresas del país en su proceso de salida al exterior primero en Latinoamérica, y luego en otras regiones. BBVA fue uno de estos acompañantes, en paralelo a su propia expansión internacional, que comenzó en los años 90 en América Latina; y continuó a principios de los 2000 en EE. UU., y en 2011, en Turquía.
La amplia presencia internacional de BBVA lo convierte en un sólido compañero de viaje en este proceso, muchas veces complejo. En 2023, la entidad ha acompañado a más de 100.000 empresas en su aventura internacional a través de productos y servicios de financiación, garantías para la expansión en mercados extranjeros y soluciones para reducir los riesgos asociados a la actividad internacional, por un importe de 31.065 millones de euros, el doble que hace tres años.
Para dar apoyo a sus clientes, tanto a pymes como a empresas de mayor tamaño, la entidad cuenta una amplia gama de soluciones digitales como los pagos en más de 50 divisas, financiación 'online' o gestión del riesgo de tipo de cambio; o herramientas gratuitas que ayudan a explorar nuevos mercados (informes de mercados, búsqueda de clientes y proveedores, calculadoras de costes de exportación…).
En 2007, BBVA comenzó un proceso de transformación con el objetivo de atender a sus clientes desde canales digitales, desarrollando una plataforma tecnológicamente avanzada y migrando la operativa bancaria a un modelo de autoservicio. La ‘app’ de BBVA ha logrado el reconocimiento internacional, en varias ocasiones, como la mejor aplicación de banca móvil del mundo, gracias a una amplia gama de funcionalidades y una experiencia de usuario de alto nivel.
La entidad continúa innovando y mejorando la experiencia bancaria digital, demostrando su compromiso con la transformación digital y la satisfacción del cliente. La aplicación de BBVA permite a los usuarios realizar múltiples operaciones, como conocer su patrimonio, herramientas para mejorar su salud financiera o conocer el valor de su vivienda y vehículo. Más de un 75% de los clientes de todo el mundo utilizan la aplicación para gestionar el día a día de sus finanzas.
BBVA ha incorporado la sostenibilidad como una de sus seis prioridades estratégicas, para hacer frente a tres grandes retos: luchar contra el cambio climático, conservar el capital natural e impulsar el crecimiento inclusivo.
La entidad ha alcanzado un nuevo récord en negocio sostenible al canalizar 26.000 millones de euros en el segundo trimestre de 2024, lo que eleva el total del primer semestre a 46.000 millones, un 37% más que en 2023. Este crecimiento ha sido impulsado principalmente por la financiación de energías renovables y tecnologías limpias. Desde 2018 a 2025, el banco se ha puesto como objetivo canalizar 300.000 millones de euros Hasta junio de 2024, ya ha movilizado 252.000 millones de euros. El 77% corresponde a la lucha contra el cambio climático y preservación del capital natural, y el 23% a promover el crecimiento inclusivo.
El objetivo se orienta a fortalecer la financiación de proyectos que promuevan la energía renovable, la reducción de la huella de carbono y la inclusión social. BBVA también apoya iniciativas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
El banco ha implementado mecanismos de seguimiento para asegurar la efectividad de los fondos y su conformidad con los estándares ambientales y sociales. De esta forma, BBVA pretende consolidar su rol como líder en el sector financiero en términos de sostenibilidad y contribuir de manera más significativa a la construcción de un futuro más verde y equitativo.
En 2024, las grandes tendencias a largo plazo que están transformando la economía y la sociedad son la innovación y la sostenibilidad. Por un lado, estamos ante una ola de disrupción sin precedentes. A lo largo de la historia, las innovaciones tecnológicas han tenido siempre un impacto significativo en el crecimiento económico y la productividad. En esta ocasión, el efecto combinado de nuevas tecnologías que se despliegan en todos los sectores de la economía será enorme.
Por otro lado, el actual contexto pasa por afrontar el cuidado del planeta. Las medidas en materia de sostenibilidad son cada vez más urgentes, con la necesidad de reducir las emisiones de carbono y combatir el cambio climático. Por ello, es crucial establecer una conexión entre el tejido productivo de nuestro país, compuesto en su mayoría por pequeñas y medianas empresas, y los retos que plantea la transición energética. Tanto empresas como gobiernos deben adoptar modelos más sostenibles, basados en energías renovables, una economía circular y prácticas responsables, con el fin de asegurar un crecimiento económico que armonice el progreso social con el respeto al medio ambiente. En este escenario de oportunidades, el papel de las entidades financieras es fundamental para financiar esta transición, ya que su tamaño y capacidades jugarán un rol clave en facilitar un futuro más equitativo y sostenible.
En este entorno, el mundo necesita bancos capaces de dar respuesta a estos retos. Retos que BBVA entiende también como una oportunidad. Una oportunidad para, apalancada en las nuevas tecnologías, enriquecer la propuesta de valor de las empresas, mejorar su productividad y su eficiencia con un uso más sostenible de recursos, para lograr una mayor competitividad e impulsar el crecimiento económico y el bienestar del conjunto de la sociedad.