David Ricardo: del valor del trabajo al salario de subsistencia
David Ricardo contribuyó a la historia económica mediante sus teorías sobre el valor y la ventaja comparativa.
David Ricardo (1772-1823) fue un destacado economista inglés coetáneo de Malthus, con el que compartió algunos análisis como el realizado sobre el mercado de divisas de Inglaterra.
Abogó por la libertad de comercio y la supresión de los inconvenientes para el movimiento internacional de mercancías, sobretodo los correspondientes a la regulación legal sobre la distribución, pero también sobre el coste laboral.
Al respecto de la distribución, desarrolló una teoría sobre la ventaja comparativa, mediante la cual defendía que aunque los países no fueran potencias en la producción de ningún bien concreto, debían especializarse en los que le proporcionaran menor desventaja o mayor ventaja en materia de comercio internacional.
Por tanto, en algunos planteamientos seguía la línea dibujada por Adam Smith, alejándose de todo proteccionismo para promover el movimiento internacional de mercancías. Esto, junto a otras de sus teorías desembocaron en el nacimiento del conocido como "Socialismo ricardiano".
Teoría del valor
Algunas de sus ideas fueron utilizadas por pensadores como Karl Marx, sobretodo en lo respectivo a la teoría del valor. En ella, David Ricardo plasmó las dificultades que suponían los costes de producción (incluyendo mano de obra) para el comercio internacional, por lo que los salarios de los empleados tendían a ser los necesarios para sobrevivir y reproducirse.
Marx utilizó estos argumentos, concretados en la "ley de hierro de los salarios", para defender la imposibilidad de que los trabajadores pudieran disfrutar de los beneficios del capitalismo.
Según esta teoría, si se establecían salarios superiores a lo necesario, la población aumentaría y los salarios bajarían al haber más oferta. Si por el contrario el sueldo se situaba por debajo de lo básico, la población bajaría y aumentarían los costes de la mano de obra (como se pudo ver durante la epidemia de peste negra de 1348)
Según David Ricardo, el equilibrio se producía por los sueldos de subsistencia que permitieran la reproducción, pero sin situarse por encima de lo necesario. No obstante, estas rentas estarían por debajo de las percibidas por los terratenientes (que representaban el capital).
El valor del trabajo se determinaría por el número de horas que necesitaría hacer un empleado para mantener un sueldo que les permitiera mantenerse a él y a su familia (salario natural), por lo que el trabajo sería la fuente de todo valor.
Efectos de la demografía sobre el salario
En la época en que fue descrita la ley de hierro, la economía agraria estaba muy extendida, así que la explicación podría ser: cuando las tierras más productivas se ocupan de trabajadores, crecía la población y esta se desplazaba a otras tierras menos productivas. Estos terrenos solo permitían obtener sueldos de subsistencia, por lo que aumentaba la competencia para trabajar las mejores tierras, haciendo que incluso bajaran los salarios de los que las trabajan.
Los sueldos naturales no deberían sufrir grandes oscilaciones por los efectos de la oferta y la demanda de empleo, y la regulación (según la teoría de David Ricardo) vendrían desde el punto de vista demográfico. Aumentando y disminuyendo la población según el salario natural se sitúe por encima o debajo del de mercado.
Podemos invocar esta teoría con los acontecimientos actuales: los problemas de empleo de España pueden producir un desplazamiento poblacional en busca de oportunidades para subsistir ¿esta competencia en los mercados exteriores puede disminuir los salarios en ellos por el aumento de la oferta? ¿Los salarios nacionales podrían llegar a aumentar ante un éxodo masivo, reduciendo la competitividad?