BBVA ya cumple con su requisito MREL de 2024
BBVA ha dado a conocer el requerimiento regulatorio del MREL que tendrá el próximo año, un colchón para absorber pérdidas que ya cumple en la actualidad. A partir de 2024, debe tener un volumen de fondos propios y pasivos admisibles del 22,11%, un 25,42% incluyendo el requisito combinado de colchones de capital, en base a sus activos ponderados por riesgo (APRs). A 31 de marzo de 2023, la entidad ya cumple con este requisito, al alcanzar un 26,89%, así como con el requerimiento de subordinación.
El Banco de España ha comunicado a BBVA el nuevo requisito regulatorio MREL (‘Minimum Requirement for own funds and Eligible Liabilities’, en inglés) establecido por la Junta Única de Resolución (JUR), calculado con información a 31 de diciembre de 2021. BBVA debe alcanzar, a partir del 1 de enero de 2024, un volumen de fondos propios y pasivos admisibles correspondiente al 22,11% del total de los APRs de su grupo de resolución europeo, es decir, su matriz y el resto de filiales que tiene en Europa.
El nuevo requisito MREL, si se tiene en cuenta la exposición total usada para calcular la ratio de apalancamiento, es de un 7,27%. Este requisito es aplicable a partir del 1 de enero de 2022.
Adicionalmente, la JUR establece también un requisito de subordinación, que obliga a las entidades a que parte de su requisito MREL se cumpla con un porcentaje mínimo de instrumentos subordinados (aquellos con un nivel de subordinación igual o mayor a la de la deuda senior no preferente). En el caso de BBVA, deberá mantener, a partir del 1 de enero de 2024, un volumen de fondos propios y pasivos admisibles subordinados del 13,50% de los APRs en Europa. Si, de nuevo, se tiene en cuenta la exposición total usada para calcular el ratio de apalancamiento, este requisito de subordinación ascendería al 5,61% y es aplicable desde el 1 de enero de 2022.
Al requisito MREL en APRs y al requisito de subordinación en APRs, se les suma el requisito combinado de colchones de capital, del 3,31%.
A día de hoy, BBVA cumple ya todos estos requisitos, tanto si se tiene en cuenta sus APRs en Europa como si se mira su exposición total incluida en el ratio de apalancamiento.
Adicionalmente, en la actualidad, BBVA cuenta con más de un 80% de instrumentos elegibles a efectos de MREL con un grado de subordinación mayor o igual que el de la deuda senior no preferente, lo que pone de manifiesto su elevada capacidad de absorción de pérdidas.
¿Qué significa MREL?
MREL pretende que las entidades europeas cuenten con un volumen mínimo de fondos propios y pasivos con capacidad de absorber pérdidas y recapitalizar la entidad en el caso de que el supervisor la declare no viable.
La Directiva de Recuperación y Resolución Bancaria (BRRD, por sus siglas en inglés) creó este requisito para asegurarse de que las entidades financieras cuenten con fondos propios y pasivos admisibles suficientes para, en primer lugar, absorber posibles pérdidas y, en segundo lugar, recapitalizarse por sí mismas, sin necesidad de recurrir a dinero público en caso de que fuera necesario. De esta forma, se evita que los contribuyentes sean quienes tengan que hacer frente a eventuales rescates bancarios.
¿Cómo se determina el MREL?
El requisito MREL se determina entidad a entidad teniendo en cuenta los requerimientos de capital, así como otros factores como la estructura societaria y su estrategia en caso de resolución.
En el caso de BBVA, dada su estrategia de resolución MPE (‘Multiple Point of Entry’), el requisito MREL no aplica al balance total del Grupo BBVA, sino a un perímetro europeo, constituido en su mayor parte por BBVA, S.A., matriz bajo la que se ubica el negocio del Grupo en España.