Diez trucos para que te dure más la batería del móvil
Lejos quedan ya aquellos tiempos en los que las funciones del móvil se limitaban a llamar, enviar SMS o jugar a la serpiente, y la duración de la batería se contaba por días. Ahora, con tanta aplicación y conexiones, son pocos los afortunados que consiguen superar las 24 horas sin enchufar el aparato a un cargador.
Sin embargo, estos diez consejos para iPhone y Android te permitirán ahorrar la energía que consume tu dispositivo y extender su autonomía para que no te deje tirado en el momento en el que más lo necesitas. Ponlos en práctica y verás cómo se estira la vida de tu móvil.
1.- Ponte al día
Conviene que mantengas a la última las aplicaciones que tienes instaladas en tu teléfono, porque lo más habitual es que con cada actualización se hayan introducido mejoras que afectan tanto al rendimiento del dispositivo como al consumo de batería. Del mismo modo, es aconsejable contar con versiones recientes del sistema operativo que hace funcionar a tu terminal. Por ejemplo, Apple ha introducido en iOS 9, hace unas semanas, la opción “Modo Ahorro de Batería”, y el flamante Android 6.0 Marshmallow incorpora las funciones “Doze”, que reduce el consumo cuando el móvil está en reposo, y “App Standby”, que suministra la alimentación que necesitan las aplicaciones en cada momento.
2.- No al segundo plano
El modo “App Standby” de Android 6.0 llega para reducir automáticamente el consumo que hacen las aplicaciones que no estás utilizando mientras haces otras tareas y que sin embargo permanecen abiertas en un segundo plano. Pero eso ya se puede hacer manualmente con versiones anteriores de Android, deteniendo o cerrando las que no necesitemos desde el menú Ajustes>Aplicaciones>En ejecución.
En dispositivos de Apple, es posible conocer las aplicaciones que se están ejecutando en segundo plano si presionamos dos veces seguidas el botón Home. Una vez ahí, mantenemos presionado el icono de la app que no queremos que siga abierta en segundo plano hasta que aparezca la opción de cerrarla.
3.- Ajusta el brillo de la pantalla
Tener activada la opción que adapta automáticamente el brillo de la pantalla a las condiciones de iluminación es algo muy cómodo, pero consume demasiada energía porque obliga a trabajar continuamente al sensor de luz. Lo mejor es mantener el brillo en un nivel bajo y ajustarlo manualmente cuando veamos que es necesario, que sobre todo sucederá cuando el Sol da directamente en la pantalla.
4.- Reduce el tiempo de espera
Dentro del apartado anterior, otra de las recomendaciones es reducir el tiempo de espera, es decir, ajustar los segundos que tardará en apagarse la pantalla de forma automática. Cuanto menos tiempo, mejor. Puede parecer que no ahorremos mucho, pero si tenemos en cuenta que un usuario medio mira unas 150 veces al día el móvil para ver la hora, comprobar notificaciones y consultar otros datos, es preferible que la pantalla se bloquee sola en 15 ó 30 segundos y no en 1 minuto, por ejemplo.
5.- Desactiva las conexiones inalámbricas
Si no necesitas el wifi, apágalo, porque de lo contrario tu dispositivo estará en alerta, realizando barridos cada cierto tiempo en busca de redes inalámbricas e incluso te conectará automáticamente a aquellas públicas a las que has accedido con anterioridad. Para ahorrar energía, también es muy recomendable desactivar otras opciones como el GPS, el Bluetooth o el NFC.
6.- Modo avión 'on'
Activa el Modo avión de tu móvil cuando te encuentres en una zona donde apenas hay cobertura. La razón es la siguiente: si el teléfono detecta que la señal que recibe es escasa, comenzará a realizar rastreos con el objetivo de mejorarla y todos estos intentos en vano consumirán batería. Con el Modo avión no podrás recibir llamadas, pero sí tendrás disponibles otras aplicaciones y alargarás la vida de tu dispositivo mientras estés en esa zona.
7.- No apures hasta el final
Nunca dejes que tu batería se consuma totalmente antes de volver a cargarla. Aunque mucha gente cree que se trata de una buena práctica para alargar la vida útil de las fuentes de alimentación, los expertos aconsejan hacer cada recarga cuando la batería se encuentra entre el 40 y el 80% de su capacidad. Si siempre esperamos a que esté al 0% y la enchufamos hasta llegar al 100%, la obligamos a hacer cada vez un ciclo completo de carga, lo cual resulta perjudicial para su funcionamiento.
8.- No cargues demasiado tiempo
Muy relacionado con el punto anterior. No es aconsejable cargar al 100% los dispositivos, sino dejarlos entre el 80 y el 90% de su capacidad. Si esto no es posible y finalmente vemos que la energía del móvil ha llegado al 100%, se recomienda desenchufar el cargador cuando antes porque si la batería permanece conectada más de lo necesario comienzan a realizarse unos “miniciclos” de carga que terminarán por acortar su vida útil. Por esta misma razón, no conviene dejar enchufado el móvil toda la noche.
9.- 'Push' contra 'Pull'
Las notificaciones que recibimos en nuestros móviles pueden llegarnos en modo “Pull”(cuando nuestro terminal conecta periódicamente con los servidores de cada servicio en busca de novedades) o en modo “Push” (cuando es el servidor el que “informa” directamente a nuestro terminal). El modo “Pull” supone un mayor consumo de batería y es el que suelen utilizar apps como Facebook, Twitter y muchos servicios de correo electrónico, así que siempre que sea posible conviene activar las notificaciones "Push" de las aplicaciones o decantarse por aquellas que utilizan siempre este sistema, como Gmail o Yahoo!
10.- Sin vibraciones
La función de vibración de los teléfonos inteligentes consume mucha batería, así que a no ser que realmente lo necesites, desactívala y apaga tu dispositivo o ponlo en modo silencio en aquellas ocasiones que no quieras ser interrumpido por los sonidos de llamadas, mensajes o notificaciones.