El dato protagoniza la revolución de la banca digital
El uso de los datos fue el tema protagonista de ‘Revolution Banking’, una cita para reflexionar sobre el futuro del negocio financiero ante la digitalización. Abre enormes posibilidades para entidades y clientes, pero antes los bancos deben adaptarse a un entorno muy distinto.
Datos, inteligencia artificial, aplicaciones móviles, regulación, ciberseguridad, los retos del ‘onboarding’, la emergencia de las ‘fintech’... Todas las cuestiones que están configurando la nueva banca de la era digital tuvieron un espacio destacado en ‘Revolution Banking 2018’.
La cita, celebrada en Madrid, y en la que participaron grandes bancos, empresas tecnológicas, firmas ‘fintech’ e instituciones como la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), trató de vislumbrar el futuro de la banca, partiendo del hecho de que el carácter disruptivo de las nuevas tecnologías hace imposible un pronóstico categórico. Pero sea como sea la banca a medio plazo, algunas de sus premisas actuales no perderán vigencia, como el peso de la regulación, y otras serán aún más importantes, como el uso del ‘big data’.
Abrió la jornada Víctor Rodríguez, director general de Política Estratégica y Asuntos Internacionales de la CNMV, quien trató de aclarar cómo va a regular el supervisor de los mercados españoles el creciente mundo de las criptomonedas y las ICOs. En su exposición, Rodríguez detalló que la CNMV aboga por aplicar la legislación vigente, sin crear una normativa específica para España, a la espera de que se establezca una postura global sobre la regulación de estas nuevas herramientas financieras.
Además, Rodríguez habló de la creación de un entorno específico para la puesta en marcha y la regulación de iniciativas ‘fintech’. Ese ‘sandbox’ español, de forma similar a los que ya llevan un tiempo funcionando en Reino Unido o Singapur, estará operativo, según la CNMV, en un periodo de entre seis meses y un año. Además de por el regulador de los mercados, el ‘sandbox’ será gestionado por el Banco de España y la Dirección General de Seguros.
"El cliente es el dueño del dato, lo cede dando expresamente su consentimiento y le retorna con un valor añadido"
Pero fueron los propios bancos, y no las instituciones públicas, los protagonistas de la jornada. Uno de los temas que más se tocaron en las diferentes ponencias y debates fue el uso del dato, ante la inminente entrada en vigor de la nueva regulación europea, la GDPR, que protege más a los consumidores y pone el foco en la responsabilidad de las empresas.
Juan José González, responsable de CRM y Consumer Intelligence de Abanca, destacó que esta normativa “es una oportunidad para todos, porque ordena y aclara el tratamiento de los datos, un terreno donde los bancos tenemos mejor imagen que las grandes tecnológicas y generamos más confianza. Así que en un futuro cercano podemos ser los custodios de los datos de nuestros clientes, como somos los custodios de su dinero”. En esta línea Marta Lamela, científica de datos en BBVA Data & Analytics, recalcó que siempre tiene que estar muy presente que “el viaje del dato empieza y acaba en el cliente. Es el dueño del dato, lo cede dando expresamente su consentimiento y le retorna con un valor añadido”.
El tratamiento de los datos es, en consecuencia, un punto clave de la banca digital, algo crítico desde el ‘onboarding’. Este proceso de apertura y contratación ‘online’ de productos y servicios financieros protagonizó una charla específica. Juan Macho, 'digital product owner' de Liberbank, definió el ‘onboarding’ como “la punta del iceberg: en muy pocos pasos tiene que completarse, sin fricción para el cliente, un proceso clave que implica prácticamente a toda la entidad”.
Mario Martínez Guerrero, director de Multicanalidad en el Grupo Cajamar, insistió en la dificultad del ‘onboarding’, un proceso que combina las altas expectativas del cliente, que “está acostumbrado a que el alta digital consista en dar un correo y una contraseña”; con procesos internos acumulados “que nacen en las oficinas y tienen muchos años detrás”; y una normativa que “exige pedir datos que en otros entornos serían preguntas de mala educación: cuánto ganas, de dónde viene ese dinero…”.
En este sentido, Emma Rey, responsable del ‘onboarding’ de la división de Corporate & Investment Banking de BBVA, señaló que ya todos los bancos piden la misma información a los clientes y que una forma de mejorar la experiencia de usuario sería centralizar esas solicitudes de documentación y compartir la información. Una idea con la que se mostraron de acuerdo otros expertos en identidad y ciberseguridad presentes en el evento. En este sentido, durante el debate abordó también del enorme potencial de la tecnología ‘blockchain’ para resolver este tipo de situaciones.
Además de coloquios y reflexiones sobre los grandes retos de la banca digital, la jornada también contó con ejemplos prácticos de casos de éxito, como la aplicación móvil de BBVA, elegida la mejor del mundo por la consultora Forrester Research. Raúl Navarrete, Head of Mobile Channel en BBVA España, fue el encargado de hablar sobre ella, en una charla muy práctica en la que mostró, por ejemplo, cómo ordenar pagos por voz a Siri, el asistente virtual de Apple, a través de la plataforma Bizum.