Cuenta remunerada: ¿por qué podría interesarte más que una de ahorro?
Las cuentas remuneradas se presentan como una alternativa rentable y cómoda para aumentar los ahorros sin realizar ningún tipo de inversión.
En primer lugar, es importante distinguir bien entre una cuenta remunerada y una simple de ahorro. Las remuneradas nos permiten obtener una rentabilidad más alta por nuestro dinero, pudiendo disponer de él en cualquier momento. Es decir, son cuentas con las que generamos rendimientos por el dinero que tenemos en ellas y, por supuesto, cuanto más dinero, más rendimiento.
Por su parte, una cuenta de ahorro también es remunerada, pero suele generar un interés constante. Es decir, te genera rendimientos, pero a largo plazo y con un interés más bajo y lineal en el tiempo. También es posible disponer del dinero en cualquier momento, pero no te da más remuneración cuanto más dinero tengas guardado. Los bancos suelen aplicar una rentabilidad de alrededor del 3% a este tipo de productos.
En este contexto, en el que se está intentando fomentar el ahorro de los españoles, y teniendo en cuenta que en el futuro, previsiblemente, tendremos que complementar las pensiones con otro tipo de producto privado, surgen multitud de dudas a la hora de decantarse por un producto u otro.
En este caso concreto, primero tenemos que tener claro qué queremos conseguir con el producto que elijamos. Es decir, si nuestra intención es tener al mismo tiempo una cuenta corriente que a la vez nos genere rentabilidad por las facturas que domiciliamos, la de ahorro es la mejor, pues podrás operar con ella y, a la vez, obtener rendimientos, aunque más bajos.
Pero si lo que queremos es una alta rentabilidad con un producto que no nos permita operar, las remuneradas son las más idóneas. Aunque en este caso hay que contar con que el interés suele ser más elevado en los primeros meses y luego baja a un porcentaje inferior. Lo bueno es que son productos líquidos, con lo que podremos recuperar tu dinero en cualquier momento.
En ambos casos, lo más importante es informarse muy bien antes de contratar cualquiera de ellos. Las condiciones de una y otra varían según la entidad, y es muy importante conocer las diferentes opciones que nos da el mercado y, sobre todo, entenderlas. Pues de ello dependen nuestra seguridad y ahorros futuros.