Cuando el euro se llamaba ecu, y los García salían por la tele
Hace 20 años, Sabina buscaba sus '19 días y 500 noches' y Luz Casal cantaba 'Mi confianza', mientras que Europa depositaba la suya en la moneda común con el lanzamiento de la divisa en los mercados internacionales. Fue en 2002 cuando los ciudadanos europeos pudieron obtener su primer ‘euromonedero’ de 20 euros, conformado por las nuevas monedas. Para entonces, la familia de los García se empeñaba en explicar una y otra vez la equivalencia entre euros y pesetas por televisión. Aquí comienza la historia de las últimas dos décadas del euro.
La génesis del euro se remonta al 15 de diciembre de 1995, cuando se acuerda —en una cumbre celebrada en Madrid— la puesta en marcha de la moneda común el 1 de enero de 1999 y su uso generalizado en toda la UE el 1 de junio de 2002 (durante los primeros seis meses de ese año convivieron las monedas locales de cada país con el euro). Además, fue en esa cumbre cuando la moneda europea fue bautizada como euro, hasta entonces era denominada ecu.
La hora de la verdad llegó el 1 de enero de 1999, cuando el euro entra en los mercados financieros y, por tanto, dejan de existir como sistemas independientes las monedas de los 11 países de la Unión que se acogieron al plan de la moneda única. Era la puesta en marcha del eurosistema, formado por el Banco Central Europeo (BCE) y los bancos centrales nacionales de los Estados de la eurozona. A partir de entonces, la política monetaria quedaría marcada por el BCE, que tiene la competencia de suministrar o retirar liquidez al sistema, mientras que los bancos centrales ejecutan dicha política.
Actualmente, el euro es la moneda oficial de 19 de los 28 países miembros de la UE, tras un largo camino de más de 40 años. El BCE y la Comisión Europea son los organismos encargados de mantener su valor y estabilidad, y de examinar si los Estados miembros que no pertenecen a la zona del euro (los denominados “Estados miembros acogidos a una excepción”) cumplen los criterios de convergencia y, por tanto, están preparados para introducir el euro.
La cumbre de Madrid
El 15 de diciembre de 1995 tuvo lugar en Madrid la cumbre que decidió el actual nombre de la moneda común. El Consejo Europeo fijó además los plazos de puesta en circulación del euro, anteriormente denominado ecu.
Los monederos de Euro
La suma de las monedas alcanzaba los 20 euros, y fue el primer contacto de la moneda común con los ciudadanos. Para poder obtener los primeros euros, los interesados podían cambiar las pesetas en cualquier entidad bancaria.
El propósito y la implantación del euro
La idea de una Unión Económica y Monetaria (UEM) se convirtió en una ambición para la Unión Europea a partir de finales de los años 60. La UEM implica la coordinación de políticas económicas y fiscales, una política monetaria común y una moneda común: el euro. La moneda única significa un gran avance, dado que ofrece múltiples ventajas como: facilitar a las empresas el comercio transfronterizo; una economía más estable; y, en definitiva, más oportunidades y facilidades para los consumidores.
En el Consejo Europeo celebrado en Maastricht en diciembre de 1991, se acordó el nuevo Tratado de la Unión Europea, que contenía las disposiciones necesarias para implementar progresivamente la unión monetaria.
Después de una década de preparativos, el euro se lanzó el 1 de enero de 1999, al mismo tiempo que se ponía en marcha el BCE. Durante los primeros tres años, el euro fue una moneda “invisible”, utilizada sólo para fines contables y pagos electrónicos. Finalmente, se emitieron monedas y billetes el 1 de enero de 2002, y en 12 países de la UE se produjo el mayor cambio de efectivo en la historia.
El primer presidente del BCE, Wim-Duisenberg, durante la presentación de los primeros billetes de euro en el año 2001.
Europa celebra dos décadas de eurosistema
“El euro ha producido dos décadas de estabilidad de precios también en países donde esta fue una memoria perdida hace mucho tiempo. Los precios estables han fomentado la confianza de la gente en el valor de sus ahorros, que es una de las condiciones para la prosperidad. Basados en esa confianza, las empresas invierten y crean nuevos empleos”, aseguró Mario Draghi, presidente del BCE, durante su discurso en la sesión plenaria del Parlamento Europeo para conmemorar el aniversario del euro en Estrasburgo, celebrado el pasado 15 de enero.
En la misma línea, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, recordó y puso en valor el viaje que Europa emprendió con la creación del euro: "Cuando lanzamos el proceso que nos llevaría a la moneda única nos llamaron locos, creían que desaparecería, que no funcionaría (...) pero hoy vemos con satisfacción y felicidad que el empeño en que nos embarcamos hace 20 años ha sido coronado de éxito". De hecho, el último eurobarómetro asegura que el 75% de los ciudadanos de la eurozona están a favor de la moneda única.
Los García, protagonistas de la campaña del euro
El Ministerio de Economía lanzó una campaña en España de introducción del euro. Para ello utilizaron una familia media, que intentaba explicar la equivalencia del euro con la peseta o las ventajas que traía consigo la moneda común.
Euros y pesetas convivieron durante seis meses
Los primeros seis meses de 2002, las monedas locales convivieron con el euro para facilitar la adaptación de los ciudadanos. Los comercios debían informar sobre el precio de los productos en ambas monedas.
Desafíos pendientes
Sin embargo, el presidente del BCE también se mostró crítico y no ocultó las carencias que aún quedan por resolver en Europa: “En algunos países, no todos los beneficios del euro se han realizado en su totalidad. En parte, esto se debe a que las reformas a nivel nacional son necesarias, y lo serían en cualquier sistema monetario, para producir un crecimiento sostenible; En parte, porque la Unión Económica y Monetaria sigue incompleta”, reconoció Mario Draghi durante su intervención.
Esta es una idea que comparte, entre otros, José Manuel González-Páramo, consejero ejecutivo de BBVA, que entre 2004 y 2012 fue miembro del Comité Ejecutivo y el Consejo de Gobierno del BCE, recordaba que el banco central ha sido un garante de la estabilidad del euro y, desde 2014, el eje del sistema financiero de la eurozona, durante un evento sobre el aniversario de esta institución con sede en Frankfurt.