'Corazones al Viento', uno de los segundos ganadores del concurso Mi Primera Empresa
Micaela Marino, de 17 años, se encuentra finalizando el secundario y con su plan de negocio 'Corazones al Viento', ganó uno de los segundos premios del concurso Mi Primera Empresa.
El pasado 29 de noviembre, en la Torre de BBVA Francés, se realizó el acto de premiación a los nueve ganadores del concurso Mi Primera Empresa, por la presentación de sus planes de negocio.
El proyecto de negocio de Micaela Marino estuvo inspirado en su hermana menor, quien a pesar de sus problemas de motricidad, completó la educación media y tiene la vocación del baile. Su plan tocó la cuerda más sensible en la premiación del concurso Mi Primera Empresa organizado por BBVA Francés.
Micaela Marino, una de las ganadoras del segundo premio del concurso Mi Primera Empresa, junto a Martín Zarich, presidente ejecutivo de BBVA Francés.
No se podría haber elegido un nombre más apropiado que 'Corazones al Viento' para un proyecto inspirado en la dificultades que afronta la familia de Micaela para que su hermana pueda continuar con una vida plena, luego de finalizar la etapa escolar formativa en instituciones especializadas.
Con sus frescos 17 años, Micaela Marino, oriunda de Ramos Mejía, en el oeste del conurbano bonaerense, confiesa que la embargaba la desazón cuando buscaba algún lugar en el que su hermana pudiera seguir preparándose para desarrollar su vocación, la danza.
Se topó con muy pocas alternativas, privadas y todas ellas inaccesibles para la capacidad económica familiar, y en la desesperación germinó la idea: crear un instituto de bellas artes de música y danza, destinado a jóvenes entre 6 a 20 años con alguna discapacidad motriz.
La escasez y costos de esta clase de centros de enseñanza hacen que se vean obligados a tener que practicar con chicos que no padecen esas dificultades y deban hacerlo en inferioridad de condiciones, o que directamente queden excluidos de este ámbito.
Del estímulo a la acción
Micaela se enteró del Concurso Mi Primera Empresa a raíz de que su padre, un antiguo cliente de BBVA Francés, recibió el anuncio a través de un mail. Se inscribió, completó los campos del Plan de Negocio en la plataforma online del certamen y presentó su proyecto.
Su ilusión se centraba en la posibilidad de sacar esa idea del ámbito íntimo para que tomara estado público a través de un certamen, y mucho más se entusiasmó cuando resultó premiada.
Su próximo objetivo es interesar a los organismos públicos u organizaciones civiles, que se dedican a instrumentar las iniciativas que dan contención a chicos, como su hermana, que si bien arrastran una discapacidad física, mantienen intacta su iniciativa y ganas de hacer cosas.