Ciudad de México emprenderá un nuevo vuelo con el Aeropuerto Internacional
El más grande proyecto de inversión para la Ciudad de México es la construcción del nuevo Aeropuerto Internacional, el cual se estima será edificado con una inversión superior a 3.000 millones de dólares, cuyo monto será financiado por un grupo de bancos y con recursos del gobierno federal. Proveedores nacionales e internacionales se preparan para participar en las licitaciones, con el objetivo de aportar maquinaria, materiales de construcción, circuitos eléctricos y cableados, así como computadoras y equipos de alta tecnología para la aviación.
A partir del segundo semestre del 2016, las autoridades y constructores podrán hacer uso de una línea de crédito revolvente por 3,000 millones de dólares –el más grande proyecto de infraestructura de América Latina- en el cual están involucrados 13 bancos, entre ellos BBVA, Santander, Banamex Citi, HSBC, JP Morgan, Scotiabank, Inbursa, Bank of Tokio, Credit Agricole, Mizuho, Sumitomo, ING y Sabadell.
El crédito, firmado a mediados de abril, forma parte de la primera etapa de un crédito estructurado por un total de 6.000 millones de dólares, en el cual están participando diversos bancos con presencia global y local, conforme a los requerimientos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
La Secretaría de Hacienda considera que esta línea de crédito revolvente por siete años permite tener la flexibilidad necesaria para construir el nuevo aeropuerto y al momento que se genere un saldo en el financiamiento, se efectúen en el mercado emisiones de bonos a largo plazo hasta por el total de 6.000 millones de dólares.
De acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el financiamiento será aportado en un 58% con recursos públicos y un 42% con recursos privados para la construcción de la estructura principal, porque algunas obras serán susceptibles de licitarse a través de las Asociaciones Público Privadas. En este caso, entra la construcción de ductos de turbosina, terminales de carga, plantas de tratamiento de agua y otros.
El nuevo aeropuerto registrará un avance del 65% al finalizar el 2018 y se espera que el primer vuelo despegue en octubre del 2020. El apoyo en infraestructura de transporte también es importante, porque habrá cuatro rutas de autobuses y dos ampliaciones del Metro, con inversiones superiores a 1,000 millones de dólares.
En su fase de máximo desarrollo, el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México tendrá 4.430 hectáreas de superficie; seis pistas de operación triple simultánea; dos terminales y dos satélites, y se calcula que pasarán por él 125 millones de pasajeros al año, con un promedio de 342.000 diarios.