Cómo entender la colocación de bonos de deuda en el mercado mexicano
En el mundo de las finanzas se escucha con frecuencia hablar de emisiones de bonos de deuda en el mercado de valores, pero a veces resulta, para los no conocedores, un tanto complicado de entender.
Las instituciones privadas, como empresas comerciales, industriales o de servicios, así como gobiernos, estados, municipios; las instituciones financieras y los bancos centrales, como el Banco de México, requieren capital para proyectos que incrementen su crecimiento y desarrollo. Para fondearse y captar los recursos necesarios, pueden hacerlo a través de emisiones bursátiles, ya sean instrumentos de capital o deuda como lo es un bono. Éstos se ofertan a los inversionistas en el mercado de valores a través de casas de bolsas o entidades financieras.
En México, para emitir un bono, es necesario contar con la autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), así como cumplir con los requisitos establecidos por ella. Asimismo, es necesario inscribir los bonos en el Registro Nacional de Valores. Una vez llevado a cabo dichos procedimientos, es necesario dar a conocer el detalle de la emisión a través del prospecto y suplemento de colocación, que incluye, entre otra información, el monto que se requiere emitir, los detalles financieros de quien lo emite, el plazo, la tasa, el destino objetivo del capital obtenido, entre otros.
A quien emite el bono se le denomina emisor y éste se compromete a reintegrarles el capital a los inversionistas (quienes prestan el dinero) más los intereses generados en un determinado periodo o plazo. A los inversionistas que compran el bono se les denomina tenedores. Por definición, un bono o instrumento de deuda se considera como capital garantizado; y la probabilidad de 'default' o de que el emisor no pague al tenedor se mide a través de la calificación crediticia que otorgan las instituciones calificadoras de valores. Esta calificación sirve para que los inversionistas potenciales verifiquen el grado de confiabilidad o calidad crediticia del emisor.
En México, como en otras latitudes, el uso de este instrumento de deuda es más común de lo que parece, pero poco a poco las instituciones públicas y privadas empiezan a ver con interés la tendencia global por ser 'verdes', 'sociales' o 'sustentables', certificándose como empresas socialmente responsables.
En general, la obtención de recursos a través de la emisión de bonos y el auge que empiezan a tener los bonos 'verdes' como una alternativa de financiamiento en el mercado de valores del país, brindan una oportunidad a las empresas mexicanas de realizar diversos proyectos de inversión. Asimismo, los bonos 'verdes' permiten a quienes los emiten comprometerse a contribuir con los esfuerzos de quienes trabajan a favor del cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad.
BBVA Bancomer, acaba de realizar una exitosa colocación de un bono verde, la primera que realiza un banco privado en México, por un monto de 3,500 millones de pesos.