Comercio, crecimiento y bienestar global en riesgo ante ruptura del TLCAN
Canadá, Estados Unidos y México se preparan para llevar a cabo la sexta ronda de renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) la siguiente semana. El economista jefe de BBVA Bancomer, Carlos Serrano Herrera, advierte en el artículo titulado “Ruptura del TLCAN traería riesgos al comercio global” publicado en El Financiero, sobre los obstáculos a los que se podrían enfrentar durante este periodo de acuerdos y con ello dejar a su paso importantes implicaciones a escala global, aun cuando algunas voces en EUA se han pronunciado a favor de la continuidad del tratado.
Serrano analiza los tres temas de mayor impacto en el entorno de esta renegociación; “el primero, se refiere a exigir que para que un automóvil sea considerado como producido en la región de Norteamérica tenga al menos un 50% de contenido estadounidense; el segundo determina introducir una cláusula para que el acuerdo sea revisado cada cinco años y, en caso de que alguna de las partes no encuentre el beneficio quede revocado; y el tercero establece eliminar el mecanismo de resolución de controversias que se incluyó en el tratado original”. El economista destaca que la primera es una propuesta proteccionista, pues “no existe algo así en ningún tratado de libre comercio en el mundo”.
Abandonar el TLCAN no significaría una reducción del déficit que Estados Unidos tiene con México y Canadá
Recientemente, el presidente Donald Trump declaró que está consciente de que México tendrá este año elecciones presidenciales, por lo que las negociaciones podrían complicarse y señaló estar dispuesto a ser paciente para lograr un buen acuerdo; esto, aunado a que el secretario de agricultura de Estados Unidos expresó que Trump está consciente de las ventajas que el TLCAN ha generado para el sector agropecuario. Por lo que, para Serrano, se puede percibir que la sexta ronda se dará en un entorno que permita ser más optimistas frente a un resultado exitoso de la renegociación.
En ese contexto, Serrano explica que es evidente que todas las partes desearían un escenario exitoso para las renegociaciones, pero en el caso particular de México, sin el TLCAN “podría seguir comerciando con Canadá y Estados Unidos bajo las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), ya que el aumento de aranceles no sería muy alto”. Y expone que la estrategia del país ante un panorama sin tratado debería ser mantener los aranceles a las importaciones estadounidenses y canadienses en cero, “beneficiando así a consumidores y a productores que utilizan insumos importados”.
Para Serrano, el problema de fondo radica en el argumento que sostiene y obsesiona a la administración de Trump con respecto a la reducción del déficit comercial que su país tiene con el resto del mundo, “déficit que se explica por desequilibrios macroeconómicos y no por cómo se han diseñado los acuerdos comerciales”. Abandonar el TLCAN no significaría una reducción del déficit que Estados Unidos tiene con México y Canadá, por lo que, al ver este resultado, Trump podría desencadenar acciones como ir en contra de las reglas de la OMC, y provocar la disminución del comercio y del crecimiento global o lo que para Serrano se convertiría en “guerras comerciales a escala global”.
La colaboración completa para el periódico El Financiero se publicó el 18 de enero de 2018 y puede consultarse en este Link.