El emprendimiento ya tiene su escuela en Colombia
Con la llegada del programa Escuela para el Emprendimiento BBVA a Bolívar, Nariño, Valle del Cauca y la ampliación a toda la ciudad de Santa Marta, la iniciativa extiende su cobertura de 20 departamentos y 282 municipios colombianos.
El programa Escuela para el Emprendimiento BBVA, que arrancó en 2012 en los departamentos de Cundinamarca y Santander con apenas 20.000 estudiantes beneficiados, ocho años después se constituye en una iniciativa que ha llegado ya a cerca de 300.000 estudiantes y a dos mil docentes en más de la mitad del territorio colombiano.
El programa Escuela para el Emprendimiento BBVA en Cúcuta.
Emprendedores hechos
“Vemos como se reflejan todas estas competencias de emprendimiento, especialmente en áreas de negocio muy propios de la región como es el caso del emprendimiento que se enfoca en mochilas arhuacas o la pequeña industria de lácteos, que ha surgido en Aguachica, un municipio ganadero de nuestro departamento”, dice José Luis Rodríguez, secretario de Educación del Cesar.
Dentro de su estrategia de formación, en el primer año sensibiliza acerca de las competencias para producir recursos financieros; en el segundo, se busca la puesta en marcha de esas ideas; en el tercero, el estudiante tiene la oportunidad de evaluar la idea; y en el cuarto año el estudiante deberá presentar un proyecto de vida a partir de los aprendizajes propios en finanzas y emprendimiento.
Este programa tiene como aliado fundamental al sector público, ya que son las secretarías de Educación las que se encargan de definir el número, la ubicación y el tipo de institución educativa a la que va a llegar la formación. Se enfoca en los lineamientos legales del Ministerio de Educación que promueve el emprendimiento y la educación financiera a través de la Ley 1014 de 2006.
Formación curricular
En la estructura curricular del programa, en la que los maestros ejercen su función de ser multiplicadores tras recibir el diplomado 'Estrategias de implementación en el aula de competencias emprendedoras financieras', se encuentran cuatro ejes: producir, administrar, usar crédito e invertir, sobre los que giran los cuatro años de la formación.
“Antes de que llegara el programa a mi colegio yo pensaba que el tema del dinero no tenía que ver conmigo, que era una obligación de mis papás procurar conseguirlo y yo simplemente lo que hacía era gastar”, dice Alexis, un estudiante de grado Décimo de un municipio de Santander.
Por eso Escuela para el emprendimiento ayuda a estructurar el espíritu emprendedor que implica no solo la formulación de proyectos sostenibles, sino además el desarrollo de una serie de habilidades denominadas competencias blandas, que le dan mejores oportunidades al estudiante en el contexto en que decida desarrollar su proyecto de vida. Dentro de las más importantes destacan:
- Pensamiento crítico
- Expresión oral y escrita
- Liderazgo
- Trabajo en equipo
- Capacidad de argumentar
- Inteligencia emocional
- Toma de decisiones
- Capacidad de negociación
El programa Escuela para el Emprendimiento BBVA en la zona rural de Manizales.
Al ser protagonista en la formación de ciudadanos, la familia también se ve impactada de forma positiva con el programa Escuela para el Emprendimiento BBVA. Dentro de sus actividades está la formulación de planes de ahorro familiares que implican el trabajo conjunto para la consecución de objetivos que se ven reflejados en mejora de la vida financiera del estudiante y su entorno.
Esta simbiosis entre empresa privada, institución educativa, Ministerio de Educación, docentes, estudiantes y sus familias se va consolidando poco a poco dentro de los procesos educativos del país y cada día se estructuran nuevas ideas de negocio, liderados por jóvenes con proyectos de vida cada vez más claros y con futuro.