China y el brote de coronavirus atraen la atención mundial en el mes de enero
Según el informe mensual ‘Situación geopolítica’ publicado recientemente por BBVA Research, el coronavirus se convirtió en la principal raíz de incertidumbre mundial. El informe pone atención a las principales causas de inestabilidad global y subraya los conflictos y protestas relativas al mes de enero de 2020.
La rápida propagación del coronavirus por toda China provocó la alerta de la Organización Mundial de la Salud, órgano que declaró la enfermedad como emergencia de salud pública de interés internacional. Se ha cuantificado el número de afectados en 73.000 personas y su presencia en más de 20 países. La mayoría de personas que presentaron síntomas de la enfermedad viajaron desde China.
Esto se tradujo en una fuerte caída de las acciones chinas. Concretamente, un retroceso de casi el 8% del índice compuesto de Shanghái durante la reapertura del mercado tras la festividad del Año Nuevo Lunar. Es la mayor caída diaria en más de cuatro años.
Por otro lado, se produjo una señal de distensión en la guerra comercial. Donald Trump firmó la primera fase del acuerdo comercial con China. El acuerdo compromete la reducción de aranceles por parte de Estados Unidos, aumentar las compras agrícolas de China a EEUU, derechos de propiedad intelectual más estrictos y una mayor apertura del sector financiero.
Europa
En términos generales, el informe señala que la intensidad de conflictos se redujo, aunque el descontento social aumentó considerablemente en casi todo el mundo. Entre las movilizaciones sociales, se produjeron protestas medioambientales en Suecia y Bosnia-Herzegovina. En Francia, las protestas contra la reforma de las pensiones se intensificaron y el sindicato de trabajadores cortó el suministro de energía. Las revueltas sociales por motivos de derechos religiosos en Montenegro continuaron. Y, en Georgia las protestas motivaron la dimisión de Raul Khajimba, presidente de la región de Abjasia. Otro hecho a subrayar ha sido la salida de Reino Unido de la Unión Europea el 31 de enero.
En Rusia se ha iniciado un proceso de reforma constitucional. La dimisión del gobierno ha otorgado al actual presidente Vladimir Putin la vía legal del procedimiento y Dmitri Medvédev ha sido reemplazado como primer ministro. Entre las propuestas, uno de los objetivos es delegar mayores competencias, que actualmente conciernen a la figura del presidente, al Parlamento (Duma). Por ejemplo, el poder de designar al primer ministro y su gabinete.
Oriente Próximo y Norte de África
En Oriente Próximo y Norte de África han continuado los conflictos. Además de Libia, donde continúa la hostilidad pese a la conferencia en Berlín, las autoridades de Irak han expulsado a las tropas estadounidenses de su país tras una oleada de protestas por el asesinado del general iraní Qasem Soleimani. En cuanto a Irán, se ha activado el mecanismo de disputa por parte de Francia, Reino Unido y Alemania, a causa del incumplimiento de los términos del acuerdo nuclear.
Entre algunos conflictos que han resurgido, por un lado, se encuentra la situación bélica en Siria. Se ha visto recrudecida tras el avance de la ofensiva de Bashar al Assad en Idlib, al sur de su provincia. Según estima la ONU, desde el 1 de diciembre se han producido cerca de 390.000 desplazamientos.
Por otro lado, la propuesta de Donald Trump para la solución del conflicto palestino-israelí provocó la división internacional y, sobre todo, el rechazo palestino. Países como Gran Bretaña, Egipto, Israel, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí se han mostrado a favor; mientras que otros como Turquía, Palestina, Jordania e Irán se han posicionado en contra. En puntos generales, el plan otorga a Israel la propiedad de territorios como la Ribera Occidental y el Valle del Jordán, establece la ciudad de Jerusalén como capital y conservará el derecho de intervención en el Estado palestino. En cuanto a Palestina, dispondrá de cuatro años para crear su propio Estado tras prometer detener los ataques contra Israel y su capital se establecerá en el Este de Jerusalén, lejos del centro y la zona sagrada.