Chile y Colombia tienen el entorno más favorable para alianzas público-privadas en América Latina
Los países de América Latina continúan progresando en el desarrollo y fortalecimiento de su marco legal para las asociaciones público-privadas en el sector de infraestructura, aunque las leyes requieren una mejor implementación. Además, se necesita de una mayor transparencia en los procesos, una mejor integración de los aspectos sociales y la ampliación de las fuentes de financiamiento para los proyectos.
De acuerdo con el informe 'El infrascopio 2017: Evaluación del entorno para las asociaciones público-privadas en América Latina y el Caribe', realizado por The Economist Intelligence Unit y apoyado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN), los países de la región se han esforzado por cerrar la brecha de inversión en proyectos claves para su crecimiento y desarrollo como los de transporte, agua y energía.
Según el estudio, Chile y Colombia, con un total de 74 puntos, lideran el ranking y son los países más fuertes en las cinco categorías que se evalúan como son: regulación, instituciones, madurez, clima de inversión y negocios, y financiación. Le siguen Brasil con 72 puntos, Jamaica (71), Péru (69) y México (68). Para el análisis se utilizaron 23 indicadores que permitieron establecer los adelantos en materia de sostenibilidad social, medio ambiente, control fiscal y planificación de presupuestos, transparencia y rendición de cuentas, y nuevos instrumentos financieros.
Se destaca que estos dos países tienen más de 25 años de experiencia y los marcos regulatorios están bien desarrollados. En cuanto a Argentina, se indica que ha implementado nuevos marcos legales para las asociaciones público-privadas (APP), pero que necesita tiempo para poner en práctica sus nuevas políticas. De igual forma, se resalta que Brasil ha establecido una unidad específica para el tema que hace que el proceso de implementación de los proyectos sea más eficiente.
The Economist Intelligence Unit
"Si bien el clima de la región para la inversión privada en infraestructura se ha fortalecido con el tiempo, las facilidades financieras en apoyo de las APP siguen siendo subdesarrolladas. Los países con mercados de capitales débiles que dependen de instituciones internacionales para financiarlos tendrán que expandir mecanismos alternativos de financiamiento, como bonos verdes o bonos de impacto para el desarrollo, para mantener su acceso al capital", concluye el informe.
También señala que a pesar de la mejora de los entornos regulatorios e instucionales, la transparencia y la rendición de cuentas en el desarrollo de las APP es mejorable, pues considera que hay pocos países que revelan completamente la información de los proyectos.