El calentamiento global incrementará la pobreza y los flujos de refugiados
El cambio climático y la pobreza son retos globales cada vez más interrelacionados, han afirmado el climatólogo Veerabhadran Ramanathan y el economista Martin Ravallion, ganadores de los Premios Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en las categorías de Cambio Climático y Cooperación al Desarrollo, que han reclamado la puesta en marcha de políticas globales para combatirlos.
“Hace tres décadas, cuando empecé a investigar la pobreza, no hubiera considerado prioritarios los factores ambientales; ahora sí son una prioridad, y eso es alarmante”, ha subrayado Ravallion.
Ambos expertos han destacado también el incremento de refugiados climáticos –consecuencia de las fuertes sequías y de la fusión de los glaciares –“que ya no se recuperarán”, ha dicho Ramanathan-. “Estamos viendo el problema que supone la llegada a Europa de un millón de refugiados. ¿Qué haremos cuando sean muchos más?”, se ha preguntado el climatólogo de la Scripps Institution de la Universidad de California.
"Los refugiados climáticos constituyen un problema mundial, y es necesaria una acción colectiva —Ravallion
El economista Martín Ravallion ha destacado que “los refugiados climáticos constituyen un problema mundial, y es necesaria una acción colectiva”, pero es complicado que suceda porque “no tenemos un gobierno colectivo”. Existen organizaciones internacionales como Naciones Unidas y el Banco Mundial que, teóricamente, deberían afrontar esta cuestión, pero “los gobiernos locales no han dado voz a estas instituciones.
Por tanto, es primordial fortalecer las instituciones mundiales y concederles el papel que merecen”, ha subrayado.
Veerabhadran Ramanathan, premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Cambio Climático, durante la rueda de prensa ofrecida en la Fundación.
El reto es proporcionar acceso a energías limpias a los más pobres
Ramanathan se mostró contundente: “Veo el problema del cambio climático en términos muy simples: los combustibles fósiles se han convertido en una tecnología del todo obsoleta, que debemos dejar atrás”.
Un cambio tecnológico urgente que debe producirse –en su opinión– no solo en los países desarrollados, sino en las regiones que albergan a los 3.000 millones de personas con menos recursos y que son quienes sin duda alguna más sufrirán los efectos de un clima alterado: “El reto es proporcionar acceso a energías limpias a los más pobres”.
Ravallion reconoció que el problema no es simple en absoluto, y que se debe asumir que por lo general un mayor desarrollo implica el aumento de las emisiones de CO2 a corto plazo. Pero “esto no es inamovible”, ha señalado. “Es muy importante resaltar que con las políticas correctas, y con la tecnología correcta, esta relación se puede cambiar”, ha insistido, para lograr que el desarrollo económico no se traduzca en más emisiones.
"Con el sol que tiene España podría convertirse en una potencia energética mundial, lo mismo que otros países lo son ahora con el petróleo —Ramanathan
La energía fotovoltaica, la eólica o eléctrica (también para el transporte); utilizar como combustibles el hidrógeno y los biocombustibles obtenidos de desperdicios de alimentos; el tratamiento de las aguas residuales; la reforestación y evitar el derroche energético mediante la construcción de edificios más eficientes son las otras propuestas que Ramanathan considera más prometedoras para atajar el cambio climático.
“Con el sol que tiene España podría convertirse en una potencia energética mundial, lo mismo que otros países lo son ahora con el petróleo”. Ha admitido que existen aún desafíos tecnológicos para aprovechar al máximo las energías renovables, pero son en su opinión solventables con el impulso adecuado.
Ramanathan también ha resaltado la importancia de “reducir las emisiones de contaminantes de corta duración, como las procedentes del carbón negro (hollín), el metano, los compuestos HFCs, el ozono troposférico generado y los óxidos de nitrógeno (NOx)”. Estados Unidos y China han dado un paso importante en esta dirección con el acuerdo firmado este mismo mes para reducir las emisiones de HFCs.
Martin Ravallion, premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento, durante una rueda de prensa en la sede de la fundación en Madrid.
"Con las políticas correctas, el progreso contra la pobreza se puede mantener— Ravallion
“Los flujos de refugiados actuales son preocupantes desde muchas perspectivas. Reflejan, en parte, la pobreza y la vulnerabilidad creada por los conflictos en Siria e Irak”, indica. “Algunos países ricos están ayudando a absorber a los refugiados, pero la mayor parte de la carga recae sobre los estados vecinos, que tienen ingresos medios. Por ello, es probable, que en los próximos años se produzca un descenso de la reducción de la pobreza”.
El actual estancamiento de la economía en China también puede hacer temer un efecto negativo sobre la pobreza, ya que existe la posibilidad de que “las menores tasas de crecimiento en China se contagien a otros países, en particular en África, donde varios países exportan materias primas a China”. Pero, ni siquiera en este escenario se muestra pesimista: “Con las políticas correctas, el progreso contra la pobreza se puede mantener”.